Izquierda Unida Aragón ha expresado su clara oposición a la propuesta de incrementar los días festivos permitidos para la apertura de grandes superficies comerciales. Según esta formación política y social, la medida representa “un grave retroceso en derechos laborales, atenta contra la conciliación y perjudica al pequeño comercio”.
Álvaro Sanz, su portavoz parlamentario en las Cortes de Aragón, ha criticado que “este modelo urbanístico y de consumo beneficia solo a las grandes cadenas y franquicias, marginando al comercio local que es esencial para la cohesión de nuestros barrios y pueblos, y es fuente de empleo estable y desarrollo local”.
Además, Sanz ha destacado que el sector comercial emplea mayoritariamente a mujeres, con más del 70% del personal, y sufre de alta precariedad, con más del 60% de los contratos a tiempo parcial. “La ampliación de festivos y la apertura indiscriminada complican seriamente la conciliación laboral y familiar, forzando a muchas trabajadoras a sacrificar su tiempo de descanso y vida personal”, ha alertado el diputado.
Izquierda Unida ha señalado que la modificación de la Ley 7/2005 sobre horarios comerciales y apertura en festivos se procesó mediante lectura única, impidiendo así el debate parlamentario y la presentación de enmiendas. “Ahora, de nuevo, el PP intenta ampliar los beneficios a las grandes superficies en detrimento del comercio de proximidad y de los derechos de las y los trabajadores”, ha denunciado.
Para el portavoz y coordinador general de la formación, “cualquier cambio en los horarios de apertura debe ser consensuado con las asociaciones vecinales, las organizaciones de consumidores y las sindicales”.
Izquierda Unida aboga por “un modelo de comercio sostenible, justo y cercano, que respete los derechos laborales, promueva la igualdad y contribuya a la cohesión social, y espera que esta medida, perjudicial para la clase trabajadora, reciba una firme respuesta por parte de la sociedad civil organizada”.