Más Madrid, PSOE y Vox han reclamado este jueves nuevas medidas para reforzar la financiación de las universidades públicas, mientras que el PP ha defendido el modelo que prevé implantar con la futura Ley de Enseñanzas Superiores Universitarias y Ciencia (LESUC).
El debate se ha producido en la discusión de los Presupuestos de 2025, en el apartado de Educación, Ciencia y Universidades. El diputado del PP Pablo Posse ha presumido de los 1.240 millones de euros destinados a las universidades públicas de la región, “más del 4% de presupuesto”.
Posse ha rechazado las críticas de la oposición, que sostiene que la inversión universitaria no se ha recuperado en términos reales desde 2009, y ha puntualizado que esa situación no se reproduce “en el conjunto de España”.
Además de contestar a las “mentiras” que, según él, vierten los grupos de la oposición, ha resaltado varias iniciativas de la Consejería, entre ellas la reducción de ratios que se viene aplicando desde hace tres años y para la que, ha remarcado, “ hace falta hacer un esfuerzo extraordinario”.
Más Madrid denuncia la “insuficiente” financiación de la universidad pública
En nombre de Más Madrid ha intervenido primero la diputada María Pastor, que ha reprochado al consejero de Educación, Emilio Viciana, un 2025 marcado por “barracones, familias sin becas comedor, chavales achicharrados en sus colegios” y una universidad pública que “están asfixiando”.
“Si usted consejero fuese consciente de lo que ha pasado este año la educación madrileña de sus dolores de sus necesidades de sus retos usted retiraría estas cuentas y empezaría de nuevo”, ha señalado Pastor, que ha pedido al PP que apoye su enmienda para un comedor “universal y gratuito” porque “su modelo no funciona” al ser “regresivo”.
Su compañero de grupo Antonio Sánchez ha considerado insuficiente el incremento de 75 millones para la universidad pública, y ha recordado que “la comunidad universitaria, los rectores y los estudiantes, que van a seguir manifestándose”.
“Hace falta invertir anualmente unos 1.900 millones, todo lo que se ha perdido secuencialmente desde los últimos 20 años es lo que nos lleva a la situación en la que estamos, es lo que nos lleva a la situación en la que estamos, en la que obligan a las universidades a endeudarse. Ustedes recortan la financiación, recortan la respiración y luego le facturan el oxígeno”, ha afeado.
El PSOE reclama un fondo específico para la universidad pública
Por el PSOE ha intervenido en primer lugar Esteban Álvarez, quien ha sostenido que la Educación “no está mejor que hace 15 años” porque, aunque Madrid ha crecido un 60% en ese periodo, “no ha repercutido como debe” en esta área, que ha perdido peso relativo en las cuentas autonómicas. “Lo que tenemos es un discurso sobre la libertad, que al final acaba siendo la libertad de pagar. La libertad de las familias para pagar si no quieren perder. Eso no es libertad, es resignación”, ha denunciado.
También por el PSOE ha tomado la palabra Horacio Díez, que ha defendido la enmienda socialista para crear un fondo de 315 millones destinado a las universidades públicas, concebido como “dotación de emergencia” para “revertir la falta de financiación histórica”.
“Un 6% de subida se queda bastante, bastante lejos. Las nóminas de ninguna de las seis universidades públicas y saben que no es por ineficiencia, saben de sobra que cualquier aumento de presupuesto hoy entra en las universidades como el que tira un vaso de agua en el desierto”, ha advertido.
Vox reclama “alivio” financiero y neutralidad ideológica
El diputado de Vox José Antonio Fúster también se ha referido a la universidad, reclamando un “alivio” para las universidades públicas, condicionado a que “demuestran un respeto escrupuloso por el mandato constitucional que exige neutralidad ideológica, libertad de pensamiento y libertad de investigación, pero no en las tesis doctorales”, sino “en el día a día de los campus y departamentos”.
En cuanto a la educación no universitaria, Fúster ha acusado al PP de “no tener un plan transformador” y limitarse “a la gestión de la decadencia y al continuismo de las ideas de la izquierda”.
“Hay demasiado temor a los sindicatos, a los titulares de prensa y ningún sano temor a las familias (...) Me temo también que no saben qué es lo que quieren que sea Madrid dentro de diez o veinte años. Más allá de un imán de personas y recursos que va a perjudicar a una España periférica vacía y precaria”, ha concluido.