Carlos Díaz-Pache, portavoz del PP en la Asamblea de Madrid, ha criticado duramente al Gobierno de España por ‘penalizar’ la reputación del Aeropuerto de Adolfo Suárez-Madrid Barajas con la llegada de inmigrantes, y ha destacado que la situación es un ‘descontrol absoluto’.
En conversaciones con Europa Press, el portavoz ha acusado al ejecutivo de manejar de manera caótica las fronteras, incluyendo la situación de los menores extranjeros no acompañados. ‘La frontera española se ha convertido en la más permeable de la Unión Europea y están entrando un número elevado de personas sin que tengamos claridad sobre su identidad, origen, propósitos, condiciones o necesidades especiales’, explicó.
Asimismo, ha reprochado al Gobierno por la falta de coordinación con las comunidades autónomas respecto a los menores no acompañados, criticando la distribución ‘absolutamente arbitraria’ de responsabilidades y la falta de un plan estructurado. ‘No entendemos los criterios usados para que algunas comunidades como País Vasco y Cataluña no reciban menores, mientras otras sí’, añadió, además de enfatizar la obligación legal de la Comunidad de atender a estos menores.
Díaz-Pache también ha mencionado la problemática de los ‘macrocampamentos’ de inmigrantes, donde el trato gubernamental a las personas es descrito como si fueran ‘fardos’. Critica la desinformación entre los alcaldes y comunidades autónomas sobre los planes del Gobierno, obteniendo información solo a través de los medios de comunicación.
Finalmente, ha solicitado la convocatoria de comisiones sectoriales para debatir y planificar adecuadamente la estrategia y los planes futuros, no solo para la atención inmediata sino también para los procedimientos a largo plazo. ‘El Gobierno de Sánchez ha optado por ignorar estas discusiones’, concluyó el portavoz.
Por otro lado, Díaz-Pache ha sugerido que existe un plan del presidente Sánchez para ‘perjudicar a Madrid’, criticando los ataques constantes a la capital en varios frentes como el agua, la energía, la fiscalidad y la economía. ‘Es una locura que el presidente esté en contra de los intereses de su propia capital’, ha declarado.










