El consejo de administración de Almirall ha decidido proceder con una emisión de obligaciones simples sénior, que alcanzarán un valor nominal de hasta 250 millones de euros, con un interés fijo anual y un vencimiento previsto para 2031.
La biofarmacéutica ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que la emisión estará asegurada por algunas de sus filiales. Los ingresos generados se utilizarán principalmente para liquidar completamente una deuda de 300 millones de euros en obligaciones sénior que vencen en 2026, incluyendo los costes asociados a esta nueva emisión.
El capital restante necesario para la cancelación total de la deuda se cubrirá con recursos propios de Almirall, según lo registrado en su balance general.
Las obligaciones, que se regirán bajo las leyes del Estado de Nueva York y se ofrecerán internacionalmente fuera de Estados Unidos, podrían no garantizar la finalización de la emisión o sus términos finales. El volumen total y las condiciones definitivas, incluyendo el tipo de interés, se establecerán tras el análisis de la demanda por parte de los inversores iniciales.
Además, Almirall planea solicitar la inclusión de estas obligaciones en el mercado Euro MTF de la Bolsa de Valores de Luxemburgo.
S&P ELEVA LA CALIFICACIÓN DE ALMIRALL
Simultáneamente, Almirall ha informado que Standard and Poor’s mejoró su calificación de ‘BB’ a ‘BB+’, con una perspectiva estable. Durante los primeros nueve meses del año, la empresa incrementó sus ventas netas en un 12,8%, alcanzando los 820,7 millones de euros, impulsado por el rendimiento de su división de dermatología en Europa.
El beneficio neto de la compañía se quintuplicó en este periodo, llegando a 39,1 millones de euros, y durante la presentación de estos resultados, Almirall reafirmó sus expectativas para 2025, que incluyen un aumento de ventas netas de entre el 10% y el 13%, y un Ebitda de entre 220 millones y 240 millones de euros.