QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha entregado a su majestad el Rey Felipe VI la Distinción de Honor de la organización, como reconocimiento a su compromiso con la defensa de los servicios públicos y a su función constitucional como garante de la unidad, del estado de bienestar y de la dignificación de los servidores públicos en todos los escalones de las administraciones.
La concesión de este galardón se materializó durante una audiencia celebrada en el Palacio de la Zarzuela, donde la delegación de CSIF, encabezada por su presidente, Miguel Borra, destacó la relevancia del papel institucional del jefe del Estado en los últimos años, subrayando su presencia en “momentos muy difíciles para nuestro país”, junto a Su Majestad la Reina, “acompañando a las víctimas de catástrofes, visitando las zonas afectadas y mostrando apoyo directo y cercano al personal de emergencias y personal voluntario”.
Para CSIF, este encuentro en Zarzuela simboliza el reconocimiento, el respeto y el agradecimiento mutuo entre la Corona y los empleados públicos, y sirve para visibilizar el trabajo que realizan los trabajadores de todas las administraciones y empresas públicas. El sindicato recalca que sus condiciones laborales suelen estar poco valoradas, pese a que su aportación resulta esencial y se hace especialmente patente en situaciones de crisis.
Durante la audiencia, según ha trasladado el sindicato, la representación de CSIF y el Rey abordaron los desafíos más relevantes que afrontan actualmente las administraciones públicas españolas, así como el reciente “Acuerdo Marco por la Mejora del Empleo Público y el Servicio a la Ciudadanía”, que ha permitido poner fin a la congelación salarial, activar “el pago de retrasos de 2025” y fijar “un incremento salarial acumulado del 11,4% hasta 2028”.
En este contexto, CSIF advirtió del progresivo deterioro de los servicios públicos —como la sanidad, la educación o la Administración General del Estado— debido a la falta de inversión suficiente, a la excesiva politización institucional y al acusado envejecimiento de las plantillas. El sindicato reclama refuerzos de personal en áreas clave como el SEPE, la Seguridad Social y la Sanidad, donde considera que las carencias de recursos humanos son especialmente graves.
Asimismo, la organización sindical denunció “el abuso de la temporalidad” en el empleo público y la necesidad de consolidar y ampliar las plantillas allí donde resulte imprescindible, dando cumplimiento a lo recogido en el propio Acuerdo, que contempla la eliminación de la actual tasa de reposición. CSIF recordó también la pérdida de poder adquisitivo que arrastran los empleados públicos desde “la bajada de sueldo de 2010” y la “demora en la resolución de los procesos selectivos pendientes”, cuestiones que, a su juicio, deben afrontarse con urgencia para garantizar la calidad de los servicios a la ciudadanía.
