El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha puesto en marcha, a través del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), una segunda convocatoria de ayudas para apuntalar la cadena de valor industrial ligada a las tecnologías limpias (Renoval 2), dotada con 355 millones de euros.
Según indicó en una nota el departamento que encabeza Sara Aagesen, y en coherencia con los principios del Pacto por una Industria Limpia promovido por la Comisión Europea, este programa “dará un nuevo impulso a la fabricación en España de equipos de tecnologías limpias y sus componentes clave, incluyendo fotovoltaica, solar térmica, eólica, hidráulica, geotermia, hidrógeno, biogás, bombas de calor y tecnologías relacionadas con la eficiencia energética, ampliando notablemente el alcance respecto a la convocatoria anterior”.
Esta nueva línea de apoyo del IDAE, que se financia con fondos NextGenEU del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) y cuyo plazo de presentación de solicitudes se abrirá del 22 de enero de 2026 al 25 de febrero, está orientada a consolidar el conjunto de la cadena de valor innovadora y del conocimiento en torno a las energías renovables en España. Abarca tanto tecnologías ya consolidadas, como la solar fotovoltaica y la eólica, como otras aún en despliegue, con especial foco en el hidrógeno renovable.
El programa también persigue el desarrollo de nuevas capacidades tecnológicas e industriales para reforzar la seguridad de suministro, mejorar la competitividad del tejido productivo y avanzar en la descarbonización de la actividad industrial.
El IDAE asumirá la gestión de estas ayudas, que se concederán mediante concurrencia competitiva y se articularán como subvenciones que el beneficiario percibirá con carácter definitivo una vez justificados los costes subvencionables y comprobada la adecuada ejecución de los proyectos.
Podrán optar a apoyo económico tanto la puesta en marcha de nuevas plantas industriales dedicadas a la fabricación de equipos de tecnologías limpias y de sus componentes esenciales, como la ampliación de la capacidad productiva en instalaciones ya existentes mediante la incorporación de nuevas líneas de producción.
Igualmente, se considerarán subvencionables las inversiones destinadas a transformar líneas ya operativas para adaptarlas a la fabricación de equipos y elementos clave que hasta ahora no se producían en la factoría.
La convocatoria se estructura en dos programas de incentivos: uno primero, dotado con 25 millones de euros, orientado a proyectos con presupuesto financiable superior a un millón de euros e inferior a 30 millones; y un segundo, con 330 millones de euros, reservado a iniciativas con presupuesto financiable por encima de 30 millones de euros.
Intensidad y condiciones de las ayudas
Con carácter general, la intensidad de la ayuda se fija en el 15% de los costes subvencionables y no podrá rebasar los 150 millones de euros por proyecto. Sin embargo, este porcentaje podrá aumentar hasta el 20% y 200 millones en las zonas consideradas “c” en la Unión Europea, y alcanzar el 35% y 350 millones en las zonas “a”.
Además, cuando las actuaciones las lleven a cabo pequeñas empresas, los porcentajes de ayuda podrán elevarse en un 20%, mientras que para las medianas empresas el incremento será del 10%.
El Ministerio precisó que los beneficiarios tendrán la opción de solicitar un anticipo, que se tratará como un pago a cuenta, hasta un máximo del importe total de la subvención concedida. Asimismo, los proyectos de inversión podrán recibir financiación complementaria de otros programas e instrumentos de la Unión Europea, siempre que no se subvencione dos veces el mismo coste. El plazo máximo para ejecutar las actuaciones apoyadas será de 48 meses a partir de la fecha de la resolución de concesión.
Junto a los criterios estrictamente económicos, se valorarán de forma prioritaria aquellos proyectos que incorporen elementos estratégicos, sociales y ambientales, como la disminución de vulnerabilidades, la generación de empleo o la reducción de la huella de carbono asociada al transporte, entre otros aspectos.
Ámbito tecnológico de las inversiones
De acuerdo con la sección 6 del Marco de ayudas estatales del Pacto por una Industria Limpia (CISAF), serán elegibles las iniciativas centradas en la fabricación de productos finales y/o componentes específicos vinculados a tecnologías limpias, dentro de las líneas de actuación de tecnologías solares, energía eólica terrestre y energías renovables marinas, así como de baterías y soluciones de almacenamiento energético.
También se contemplan las bombas de calor y las tecnologías de energía geotérmica, de hidrógeno, de biogás y biometano sostenibles, de redes eléctricas, hidroeléctricas, otras fuentes de energías renovables, soluciones de eficiencia energética relacionadas con el sistema energético, y tecnologías industriales transformadoras orientadas a la descarbonización.