El Ibex 35 registraba a mediodía de este viernes un retroceso del 0,15%, hasta los 17.108,6 puntos, en una sesión marcada por la última “cuádruple hora bruja” del ejercicio, un evento que suele traer consigo una fuerte volatilidad en las plazas bursátiles, y por la publicación del indicador de inflación preferido por la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
Este viernes expiran las opciones y los futuros sobre índices y acciones tanto en los mercados europeos como en los estadounidenses, en un escenario condicionado por las decisiones más recientes de política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) y de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, que ha mantenido los tipos de interés en el primer caso y los ha rebajado en el segundo.
Pese a la volatilidad asociada a este fenómeno, el selectivo español mostraba una evolución relativamente estable desde la apertura y apenas se movía respecto a los niveles de cierre registrados el jueves.
Con todo ello, en el balance provisional de la semana, el Ibex 35 acumulaba una subida del 1,5%, suficiente para establecer nuevos máximos históricos, mientras que en el conjunto de 2025 la revalorización alcanza el 47,5%.
En el plano macroeconómico, este viernes se publicará en Estados Unidos la inflación PCE de octubre, uno de los datos de referencia que la Fed utiliza para orientar su política monetaria. Asimismo, se difundirá la lectura final de diciembre de la confianza del consumidor elaborada por la Universidad de Michigan.
En Europa, el índice Gfk de clima de consumo en Alemania para enero ha empeorado dentro de terreno negativo, a pesar de que el consenso del mercado anticipaba una ligera mejora. Ya por la tarde, se dará a conocer la primera estimación de la confianza del consumidor de la eurozona correspondiente a diciembre.
En paralelo, dentro del ciclo de reuniones de bancos centrales, el Banco de Japón ha cumplido las previsiones al acordar por unanimidad un incremento de 25 puntos básicos en los tipos de interés, hasta el 0,75%, su cota más alta en tres décadas, y deja la puerta abierta a nuevas alzas en el futuro si la inflación se estabiliza en torno a su meta del 2%.
“En definitiva, 2026 se perfila como un año marcado por una mayor divergencia entre los bancos centrales, que han dejado atrás la sincronía observada tras la pandemia y durante el episodio inflacionista derivado del conflicto entre Ucrania y Rusia”, han apostillado los expertos de Banca March respecto a esta materia.
En el ámbito corporativo español, BBVA ha comunicado el lanzamiento de un programa extraordinario de recompra de acciones por un importe máximo de 3.960 millones de euros, el mayor de su historia, que arrancará el próximo lunes, 22 de diciembre, una vez obtenidas todas las autorizaciones necesarias.
A su vez, CaixaBank ha ejecutado ya el 16,36% de su plan de recompra de acciones durante la cuarta semana desde su inicio, cuyo volumen máximo está fijado en 500 millones de euros.
Además, Fluidra ha suscrito un acuerdo para adquirir el 100% de Variopool, empresa con sede en los Países Bajos, valorada en hasta 21 millones de euros.
En el tramo central de la sesión, los mayores avances del Ibex 35 correspondían a Acciona (+1,32%), Mapfre (+1,31%), Banco Sabadell (+0,77%) e Iberdrola (+0,7%). En el lado de las caídas destacaban Enagás (-3%) y Telefónica (-1,72%).
Las principales Bolsas del Viejo Continente se movían con signo mixto, pero sin grandes desvíos respecto a los cierres de la víspera: Londres repuntaba un 0,01% y Milán un 0,4%, mientras que París cedía un 0,03% y Fráncfort un 0,05%.
A esa misma hora, el barril de crudo Brent, referencia en Europa, avanzaba un 0,22%, hasta 59,95 dólares, mientras que el West Texas Intermediate (WTI), referencia en Estados Unidos, sumaba un 0,37%, hasta 56,36 dólares.
En el mercado de divisas, el euro se cambiaba por 1,1712 “billetes verdes”, una décima menos que en la jornada anterior, mientras que la rentabilidad del bono español a 10 años se situaba en el 3,32% tras subir casi media décima, con la prima de riesgo frente al “bund” alemán en 43 puntos básicos.
Por otro lado, la onza de oro troy se negociaba en 4.330 dólares, un 0,1% por debajo, mientras que el bitcoin se disparaba un 3,1% hasta los 88.250 dólares.