Según el último barómetro del CIS enfocado en turismo y gastronomía, la mayoría de los españoles elige pasar sus vacaciones de verano durante una o dos semanas, priorizando los destinos de sol y playa y optando por hospedarse en hoteles o apartahoteles. Este estudio también subraya el creciente valor de la gastronomía como un aspecto cultural y social relevante, destacando la paella, la tortilla de patatas y el jamón ibérico como los platos más emblemáticos.
El informe revela que un 32,2% de los encuestados vacaciona entre una y dos semanas, mientras que un 28,1% lo hace solo una semana y un 19,3% por más de dos semanas. Solo un 17,6% se queda menos de una semana.
En términos de alojamiento, un 43,8% prefiere hoteles o apartahoteles. Las viviendas de familiares o amigos son la segunda opción con un 14,4%, seguido por el alquiler vacacional con un 13,1%. Respecto a los destinos, un 37,5% elige pueblos costeros o cercanos a la costa, seguidos de ciudades costeras (24,8%) y pueblos de interior o montaña (22,5%).
El 51,3% de los españoles favorece el turismo de sol y playa, en contraste con el 39,2% que selecciona el turismo cultural y el 34,9% que prefiere la naturaleza. El turismo rural es elegido por el 30,9%, mientras que el gastronómico alcanza el 26,6%.
SALIR A COMER EN VACACIONES
Con respecto a la gastronomía, el 30,5% visita restaurantes dos o tres veces al mes, el 29,1% más de tres veces y un 20,5% al menos una vez, de acuerdo con el CIS.
El 55,7% de los que comen fuera durante las vacaciones gastan entre 15 y 30 euros por persona, y un 28,6% entre 31 y 50 euros. Durante las vacaciones, la frecuencia de comer fuera aumenta: un 27% lo hace dos o tres veces por semana, un 25,3% más de tres veces, y un 22% lo hace todos los días.
GASTRONOMÍA COMO IDENTIDAD CULTURAL
La salud que proporciona la comida, el placer de degustarla y las relaciones sociales que se generan alrededor de la mesa son altamente valoradas por los españoles (86,9%, 85,8% y 85,6%, respectivamente). Un 79,9% considera muy o bastante importante la cultura gastronómica con la que se identifican.
En la cocina, la paella (63,4%), la tortilla de patatas (58,3%) y el jamón ibérico (43,8%) son vistos como los platos más representativos de España. En el debate habitual sobre la tortilla, el 74,9% la prefiere con cebolla y el 53,3% poco hecha.
El estudio también destaca la diversidad regional en la cocina: la fabada en Asturias (88%), el cocido montañés en Cantabria (85%) o el cocido madrileño en Madrid (71,9%) son algunos de los platos típicos de cada zona.
