El talento, la capacidad de integrar personas, cultura corporativa y resultados, junto con una visión a largo plazo y la toma de decisiones estratégicas en entornos volátiles, se sitúan entre los rasgos fundamentales del perfil de CEO que seguirá siendo relevante en 2026, según un análisis de procesos reales con consejos de administración y comités de dirección de distintos sectores elaborado por Catenon.
La firma especializada en talento subraya las nuevas exigencias de los órganos de gobierno, que reclaman “CEOs con criterio, visión y capacidad de escucha” y directivos “capaces de generar consenso y movilizar a la organización en contextos de incertidumbre prolongada”, frente a modelos de liderazgo apoyados únicamente en la jerarquía o el control.
Entre las competencias más apreciadas figura también la asunción de la transformación como “un proceso continuo”, así como la comprensión profunda de la tecnología para pilotar su implantación “con criterio y visión”.
Al mismo tiempo, gana peso la habilidad de comunicar con claridad, generar confianza y acompañar a los equipos en momentos de cambio, junto con la sostenibilidad entendida como la capacidad del negocio para mantenerse viable en el largo plazo.
A ello se añaden la gestión del cambio cultural, la automatización, la redefinición de funciones y la evolución del empleo, ámbitos que el máximo ejecutivo debe liderar de forma “coherente, cercana y alineada con la estrategia”.
Otra característica determinante que revela el estudio es la habilidad para “equilibrar ambición y prudencia”, combinada con un liderazgo de mentalidad global y ejecución local, preparado para ajustarse a contextos específicos y dirigir muy cerca del negocio y del talento.
Desde Catenon señalan que la transformación no se centra tanto en los cargos como en las expectativas: el CEO de 2026 deja de ser un perfil puramente financiero u operativo para convertirse en “un líder capaz de gestionar complejidad, personas y transformación de forma simultánea”.
De acuerdo con el 'Future Jobs Report 2025' del World Economic Forum, el 39% habilidades consideradas hoy esenciales para un director ejecutivo cambiarán antes de 2030, lo que forzará a las empresas a revisar sus estructuras y sus modelos de liderazgo, según apunta Catenon.
Asimismo, la 28ª Encuesta Global de CEO de PwC refleja un “optimismo prudente”, ya que cerca del 60% de los primeros ejecutivos confía en una mejora del crecimiento económico, “siempre que sus organizaciones sean capaces de transformarse de forma sostenida”.