La firma de servicios para entidades financieras y compañías inmobiliarias en España y Portugal, Tecnotramit, anticipa que el mercado de la vivienda continuará en situación de tensión durante 2026. A su juicio, la combinación de regulación, falta de oferta y elevada volatilidad emocional seguirá presionando al sector residencial.
La compañía subraya en un comunicado difundido este lunes que la actual presión sobre el mercado residencial "no puede explicarse únicamente desde variables económicas", puesto que la limitada oferta se solapa con dinámicas de comportamiento que alteran decisiones y expectativas de los agentes.
Según Tecnotramit, "sesgos como el anclaje, el FOMO (miedo a quedarse fuera) o la imitación social incrementan la ansiedad de acceso y aceleran operaciones, incluso cuando algunos indicadores muestran mejoras".
Las políticas públicas y la "trampa del corto plazo"
En esta línea, el consejero delegado de Tecnotramit y economista y doctor en Psicología Económica, Vicenç Hernández Reche, recuerda que "los precios no solo responden a oferta y demanda, sino también a emociones, expectativas colectivas e incentivos mal diseñados". Por ello, insiste en que las políticas públicas deben esquivar la "trampa del corto plazo", en la que la urgencia política se traduce en medidas vistosas pero, en última instancia, contraproducentes.
El directivo plantea que las administraciones han de combinar apoyos inmediatos con una estrategia estable que aumente la capacidad productiva del sistema, considerando el suelo disponible, la seguridad jurídica, la colaboración público-privada y la estabilidad normativa. "El gran desafío es que la vivienda exige políticas de ciclo largo en entornos electorales de ciclo corto", ha recalcado.
La empresa remarca que la escasa producción de vivienda sigue siendo el principal cuello de botella. Entre los factores que lo explican cita el encarecimiento de costes, la falta de mano de obra, la rigidez administrativa y los continuos cambios regulatorios, que frenan el lanzamiento de nuevos desarrollos. A ello se añade la "resistencia social a nuevas promociones y una fragmentación institucional que dificulta la coordinación".
Licencias, gestión urbanística y estabilidad regulatoria
Para corregir este escenario, Hernández Reche plantea acelerar la tramitación de licencias, profesionalizar la gestión urbanística, dar estabilidad al marco regulatorio y poner suelo en el mercado de forma planificada. "Sin una acción integral y medible, la oferta nunca alcanzará el ritmo que exige la demanda", ha señalado.
Del mismo modo, Tecnotramit destaca que la estabilidad normativa es "clave" para captar inversión. El ejecutivo incide en que los inversores no rehúyen el riesgo, sino la incertidumbre que no puede cuantificarse, por lo que ve "imprescindible" afianzar reglas estables, seguridad jurídica, transparencia y marcos fiscales predecibles.
Según la firma, un entorno regulatorio estable reduce la prima de riesgo, agiliza la toma de decisiones y favorece la entrada de capital internacional. En paralelo, Hernández Reche identifica oportunidades significativas en el 'build-to-rent', la rehabilitación energética y los mercados regionales en crecimiento, donde la demanda internacional continúa actuando como palanca relevante.
De cara a los próximos años, Tecnotramit señala tres palancas esenciales para avanzar hacia un mercado residencial más equilibrado: una regulación estable y coordinada, una mayor capacidad de producción y diversificación de la oferta, y un uso intensivo de datos y tecnología que contribuya a contener la volatilidad emocional.
La compañía considera que la digitalización, el PropTech y nuevas fórmulas de financiación, como el private credit o la tokenización, impulsarán un sector más eficiente, previsible y menos condicionado por percepciones distorsionadas. "Un mercado basado en información fiable y reglas claras es más accesible y resiliente", ha concluido Hernández Reche.