Telefónica ha trasladado a los sindicatos una nueva oferta para disminuir en un 5% adicional la afectación del expediente de regulación de empleo (ERE) en Telefónica Global Solutions, Telefónica Innovación Digital y Telefónica S.A., tres de las siete sociedades inmersas en el proceso de despido colectivo que se está negociando. Esta rebaja se suma al 5% ya comunicado la semana anterior y, según los cálculos de UGT, supone 75 salidas menos de las previstas inicialmente.
El sindicato ha calificado este movimiento como “positivo”, aunque subraya que la rebaja planteada por la compañía todavía resulta insuficiente y que la afectación del ajuste debería ser “mucho mayor” para evitar despidos forzosos en estas tres filiales. La representación social insiste en que el objetivo debe ser que todas las bajas se produzcan de forma voluntaria.
Con la nueva propuesta, las extinciones en Telefónica Global Solutions quedarían fijadas en 126, lo que implica un recorte del 10% frente a las 140 salidas que figuraban en el planteamiento inicial. En Telefónica Innovación Digital, el número de afectados se reduciría a 210, frente a los 233 contemplados al principio del proceso, mientras que en Telefónica S.A. el ajuste se rebajaría hasta 340 empleados, desde los 378 que se pusieron sobre la mesa al inicio de las conversaciones.
En conjunto, estas tres filiales sumarían 676 salidas, un 10% menos que las 751 propuestas en un primer momento. Con esta revisión y la reducción adicional de los despidos previstos en Movistar+, donde el número de afectados se ha rebajado a 245 desde los 297 iniciales, la afectación global del ERE en las siete sociedades implicadas se situaría en 5.961 trabajadores.
Dentro del marco negociador, la empresa ha aceptado que el personal adscrito a áreas consideradas “críticas” pueda acogerse de forma voluntaria al ERE, aunque exclusivamente mediante fórmulas de prejubilación. Esta apertura se suma a la posibilidad ya contemplada de que los empleados nacidos en 1971 puedan sumarse voluntariamente al proceso.
UGT ha remarcado, no obstante, que “toda persona que quiera acogerse voluntariamente debe poder hacerlo” y ha reiterado su reclamación de “ampliar los años de apertura del proceso para que la prejubilación sea el mecanismo central de ajuste”. El sindicato insiste en que la voluntariedad y la ampliación de los colectivos con acceso a la prejubilación deben ser ejes básicos del acuerdo.
En el capítulo indemnizatorio, se mantienen los tramos de renta para los nacidos entre 1969 y 1971, que percibirán el 68% del salario regulador hasta los 63 años y el 38% a partir de esa edad. Para quienes hayan nacido entre 1965 y 1968, la oferta contempla un 62% del salario regulador hasta los 63 años y un 34% posteriormente, mientras que para los nacidos en 1964 o antes los porcentajes se sitúan en el 52% hasta los 63 años y en el 35% a partir de entonces.
Además, la empresa ha mejorado las indemnizaciones para las salidas que no se cubran mediante prejubilaciones, situándolas en una horquilla de entre 47 y 36 días de salario por año trabajado, con un tope máximo de 36 mensualidades. A estas cantidades se añaden primas de voluntariedad vinculadas a la antigüedad en la empresa, que oscilan entre los 2.500 y los 9.000 euros.
En concreto, los empleados con menos de 8 años de servicio percibirán 2.500 euros; quienes acumulen entre 8 y 12 años recibirán 3.500 euros; entre 12 y 16 años, 4.500 euros; entre 16 y 20 años, 6.000 euros; entre 20 y 24 años, 7.500 euros; y aquellos con más de 24 años de antigüedad tendrán derecho a 9.000 euros en concepto de prima adicional.
“Para UGT estas condiciones siguen lejos de los mínimos necesarios y deben mejorar sustancialmente, tanto en días por año trabajado como en topes y primas, para garantizar compensaciones dignas y que fomenten la adhesión voluntaria”, ha señalado la organización sindical, que considera que la propuesta actual aún no garantiza un nivel de protección suficiente para los afectados.
El sindicato ha añadido que, pese a los avances registrados en los últimos encuentros, la compañía debe revisar “de forma global sus planteamientos” si quiere facilitar un acuerdo final que asegure salidas “voluntarias, justas y adecuadamente compensadas” en el conjunto de filiales incluidas en el ERE.










