Telecom Italia, conocida como TIM, ha revelado recientemente que durante los primeros nueve meses del año, sus pérdidas netas se situaron en 109 millones de euros, lo que representa una disminución del 78,6% en comparación con el mismo lapso del año pasado.
Los ingresos operativos de la compañía descendieron ligeramente un 0,5%, alcanzando los 9.976 millones de euros, mientras que los ingresos por otros conceptos se ubicaron en 197 millones de euros. El resultado bruto de explotación, o Ebitda, también experimentó una caída del 15,5%, quedándose en 3.101 millones de euros.
En el tercer trimestre, TIM registró ganancias de 23 millones de euros, lo que supone una reducción del 83,2% respecto a los 137 millones de euros del año anterior. Los ingresos operativos se redujeron un 5,3%, situándose en 3.379 millones de euros, y los ingresos por otros conceptos alcanzaron los 62 millones de euros.
En su informe financiero, TIM ha señalado que las operaciones de Sparkle, que incluyen la gestión de extensas redes de cables submarinos, han sido clasificadas como ‘suspendidas’ después de su venta por 700 millones de euros a entidades como el Gobierno italiano y Retelit, esta última bajo el control del fondo español Asterion.
















