El director general del IbSalut, Javier Ureña, ha anunciado en el Parlament que se pondrá en marcha un plan específico de formación para que los técnicos del SAMU 061 puedan ponerse al volante de las nuevas ambulancias en “unos meses”.
Ureña ha ofrecido estas explicaciones en la Comisión de Salud, donde ha comparecido para detallar las incidencias ligadas a la incorporación de estos vehículos al servicio de emergencias.
Según ha explicado, la adquisición de ambulancias de más de 3.500 kilos se llevó a cabo de forma “consciente” y “premeditada” porque, a su juicio, eran “los mejores que había en el mercado”, aun sabiendo que únicamente 83 trabajadores del SAMU 061 disponían del carné tipo C necesario para conducirlas.
En relación con las críticas por las modificaciones realizadas en las ambulancias antes de su puesta en servicio, ha defendido que se trata de adaptaciones “pequeñas”, que “no las van a percibir los usuarios” y que, además, en “unos meses” también se “solventarían”.
Ha añadido que se retirará “una butaca y una camilla”, un cambio que, según ha trasladado, los profesionales han recibido “encantados”, y ha subrayado que para el IbSalut la formación de su personal es “fundamental”.
Respecto al ajuste de los vehículos, ha precisado que estas actuaciones ya están contempladas en los pliegos del contrato, por lo que no procede asumir un mantenimiento extra fuera de lo estipulado.
El responsable del IbSalut ha indicado igualmente que el contrato ha entrado en vigor este mismo miércoles, motivo por el cual “no ha habido sobrecostes” derivados del periodo de adaptación de las ambulancias.
En otro orden de cosas, ha detallado que la clasificación del personal de la plantilla subrogada del Gsaib desde 2018 se ha completado en agosto de este 2025 y que la relación de puestos de trabajo ya se habría remitido a la Dirección General de Función Pública.
Desde la oposición, la diputada del PSIB Patricia Gómez ha censurado la “falta de previsión” de Ureña, ha reclamado datos sobre la resolución del contrato con la antigua concesionaria del servicio de ambulancias, ha señalado que el 80% de la plantilla del Gsaib carece del carné tipo C y ha preguntado si el IbSalut ofrecerá incentivos para que los trabajadores lo obtengan.
Por parte de MÉS per Mallorca, Marta Carrió ha calificado de “preocupante” la lentitud en la elaboración de la relación de puestos de trabajo, lo que, según ha indicado, habría impedido constituir una bolsa de personal interino. Sobre las modificaciones para reducir el peso de las ambulancias, ha citado como ejemplo la retirada de una rampa hidráulica, que, a su juicio, tendrá “un impacto en los trabajadores”.
Carrió también ha reclamado detalles sobre cómo se articulará la capacitación de la plantilla para conseguir el carné tipo C y si el IbSalut asumirá los complementos retributivos asociados a esta cualificación.
El diputado de Unidas Podemos José María García ha recordado que en los pliegos se recogía que responsables de la empresa adjudicataria debían visitar las instalaciones del SAMU 061 y ha señalado que, si finalmente suministraron ambulancias de más de 3.500 kilos, es que “no conocen la empresa, ni los recursos humanos”.
Por último, Ureña ha precisado que la resolución del contrato con la anterior empresa se produjo por incumplimientos en la entrega de vehículos, una situación que podría implicar la pérdida de fondos europeos por valor de “unos 10 millones de euros”, y ha indicado que el asunto sigue pendiente de resolución en los tribunales baleares.











