El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk, ha comunicado este viernes que más de 53 personas han perdido la vida en El Fasher, Darfur Norte, a causa de las agresiones de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) esta semana.
“Estoy horrorizado por la falta de respeto de las RSF por la vida humana. A pesar de los repetidos llamamientos, incluso por mi parte, siguen matando, hiriendo y desplazando a civiles mientras atacan objetivos civiles, incluidos campos de desplazados, hospitales y mezquitas”, expresó en una declaración.
Turk acusó a estas fuerzas paramilitares de infringir el Derecho Internacional y enfatizó que es imperativo que estos actos cesen. Además, indicó que la cifra real de víctimas podría ser aún mayor. Detalló que los ataques se sucedieron entre el 5 y el 8 de octubre, y reveló que al menos 46 de los fallecidos murieron por heridas infligidas en ataques con drones y artillería en las áreas de Abú Shuk y Daraja Ula, y en un campo de desplazados.
De estos 46, al menos 14 civiles fallecieron en una serie de ataques al Hospital Saudí, el mayor en funcionamiento en Darfur Norte. “El hospital ha sido atacado en reiteradas ocasiones y estaba operando con una capacidad reducida antes de sufrir daños significativos durante estos últimos ataques”, aclaró.
Otros siete murieron en ejecuciones extrajudiciales en el contexto de los ataques, según explicó, mientras instaba a las RSF a “aprender las lecciones después de que esta semana el Tribunal Penal Internacional condenara a Ali Kushaib por la comisión de crímenes de guerra en Darfur”.
Finalmente, hizo un llamado a todos los países miembro de la ONU para que usen su influencia y adopten medidas urgentes para “proteger a los civiles y evitar futuras atrocidades en El Fasher y en todo Darfur”.