QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
Como parte de un acuerdo de desarme con el gobierno de Beirut, Al Fatá, liderado por el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha transferido un lote de armas al Ejército de Líbano, originarias de campamentos en el distrito de Tiro, al sur del país. Este plan ha generado desconfianza en otras facciones palestinas.
Según Nabil abú Rudeina, portavoz presidencial, las armas proceden específicamente de los campamentos de Rashidie, Al Bas y Burj al Shamali, situados al sur del río Litani, reportó la agencia WAFA.
Este arsenal, distribuido en ocho camiones, incluía misiles, minas, municiones de artillería de varios calibres, granadas y otros armamentos. Fuentes citadas por ‘L’Orient-Le Jour’ indicaron que esto representa todo el armamento de Al Fatá en esos tres lugares.
La Autoridad Palestina y Líbano acordaron formar una comisión para monitorear el proceso y ya se realizó una primera entrega de armas la semana anterior, en un esfuerzo de Beirut por centralizar el control de armamentos en el Estado.
El enviado especial estadounidense para Siria, Thomas Barrack, describió este comienzo del desarme de facciones palestinas en Líbano como ‘un paso histórico hacia la unidad y la estabilidad, que demuestra un verdadero compromiso con la paz y la cooperación’.
Varias facciones, incluyendo Al Fatá, el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), dominan los doce campamentos palestinos en Líbano, mayormente fuera del alcance gubernamental.
El proceso de desarme, acordado entre Abbas y el presidente libanés, Joseph Aoun, se había programado originalmente para junio, pero se retrasó por la falta de cooperación de algunas facciones, especialmente Hamás, y por el reciente conflicto de 12 días entre Irán e Israel.
El gobierno libanés también se ha comprometido a desarmar a Hezbolá, aunque su secretario general, Naim Qasem, ha pedido medidas para asegurar la defensa nacional y criticó que el foco de Beirut esté en el desarme en lugar de ‘disuadir al agresor’ israelí de nuevos ataques o la retirada de las tropas israelíes de suelo libanés.
