Al menos una persona ha perdido la vida y otras 32 han resultado heridas, once de ellas trasladadas a hospitales, tras un ataque aéreo ruso lanzado durante la pasada noche contra Kiev, capital de Ucrania, que sufre ahora numerosos apagones y amplios cortes en el suministro de calefacción.
El balance más reciente ha sido difundido por la Policía Nacional de Ucrania, después de que el alcalde de la ciudad, Vitali Klitschko, detallara en su canal de Telegram el impacto del bombardeo, que ha dejado sin calefacción a aproximadamente una tercera parte de la capital, afectando a más de 2.600 bloques de viviendas, 187 guarderías, 138 centros escolares y 22 entidades de carácter social.
La víctima mortal es un hombre de 71 años que quedó atrapado bajo los cascotes tras la explosión de un misil ruso en el distrito de Dnipro. Su esposa, de 70 años, ha sido ingresada en estado crítico.
Las fuerzas policiales siguen interviniendo en los siete distritos golpeados por el ataque, con un despliegue de más de 200 agentes centrados en las labores de desescombro.
El ataque se ha producido a menos de 48 horas de la prevista reunión en Estados Unidos entre el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, y el mandatario estadounidense, Donald Trump, en la que ambos líderes intentarán dar un impulso definitivo a un posible acuerdo de paz.
En su valoración del bombardeo, Zelenski ha indicado que las defensas antiaéreas ucranianas lograron interceptar 474 drones y 29 misiles empleados por Rusia en sus ataques contra Ucrania desde la noche del 26 de diciembre, y ha recalcado que episodios como el de esta noche demuestran, una vez más, que el presidente ruso, Vladimir Putin, no tiene ninguna voluntad real de negociar el fin de la guerra.
“Esta es la verdadera actitud de Putin y su círculo íntimo: no quieren poner fin a la guerra y buscan aprovechar cualquier oportunidad para causar aún más sufrimiento a Ucrania y aumentar la presión sobre otros países”, ha denunciado Zelenski, que viaja ya hacia EEUU tras hacer una parada en Canadá, donde se reunirá con el primer ministro Mark Carney.