El ministro de Exteriores belga, Maxime Prévot, manifestó su desacuerdo con la propuesta de la Comisión Europea de utilizar los activos rusos congelados para financiar un préstamo destinado a Ucrania. Prévot expresó que el ejecutivo europeo no ha atendido adecuadamente las preocupaciones de Bélgica y ha demandado una solidaridad que no se ve correspondida.
“Tenemos la frustrante sensación de no haber sido escuchados. Nuestras preocupaciones están siendo minimizadas y el texto que la Comisión presentará hoy no aborda nuestras preocupaciones de manera satisfactoria”, declaró Prévot al reunirse con sus homólogos de la OTAN.
El ministro belga subrayó que las inquietudes de su país, donde se encuentra Euroclear, principal custodio de los activos rusos en Europa, están siendo subestimadas. Reiteró su negativa a la operación propuesta por la Comisión para emplear esos activos en un préstamo de reparación de hasta 140.000 millones.
“No es aceptable usar el dinero y dejarnos solos afrontando los riesgos. El préstamo de reparaciones propuesto no es claramente una opción preferida y es la peor de todas”, afirmó, destacando los riesgos y la novedad de esta estrategia. Prévot propuso como alternativa la captación de fondos a través de los mercados de capitales para financiar el préstamo a Ucrania.
Por su parte, David van Weel, ministro de Exteriores de los Países Bajos, aseguró que los estados miembros de la OTAN están dispuestos a ofrecer garantías a Bélgica frente a posibles reclamaciones rusas.
“Estos activos son cruciales, y entendemos las preocupaciones de Bélgica. Estamos dispuestos al menos a asegurarnos de que no estén solos en esto, en caso de que las cosas salgan mal y haya consecuencias financieras”, explicó van Weel.
