En un acto que refleja un cambio significativo en la política internacional, los jefes de gobierno de Canadá y Australia, Mark Carney y Anthony Albanese respectivamente, han formalizado el reconocimiento de Palestina como Estado. Este gesto, que ya había sido anticipado por ambos dirigentes, marca un hito en las relaciones diplomáticas de sus naciones.
“Canadá reconoce el Estado de Palestina y ofrece nuestra alianza para contgruir la promesa de un futuro pacífico”, declaró Carney, haciendo énfasis en la paz que se busca tanto para palestinos como israelíes.
Albanese, por su parte, subrayó la importancia de este reconocimiento para las “legítimas aspiraciones del pueblo de Palestina de tener su propio Estado”, aunque resaltó que “la organización terrorista Hamás no debe tener ningún papel” en el desarrollo futuro de Palestina.











