Tomio Okamura, presidente del Parlamento de República Checa y líder del partido ultraderechista Democracia Directa y Libertad, ha generado controversia al quitar la bandera de Ucrania de la fachada del edificio parlamentario, evidenciando así su posición respecto al conflicto ruso-ucraniano.
Desde que asumió la presidencia de la Cámara, Okamura ha sido objeto de críticas por parte de numerosos legisladores, debido a su decisión de remover la bandera ucraniana, lo que ha provocado que varios partidos políticos hayan colocado banderas de Ucrania en las ventanas de sus oficinas dentro del Parlamento. Estos diputados pertenecen principalmente a los partidos de la coalición del gobierno anterior.
Marketa Pekarova Adamova, predecesora de Okamura, ha calificado la acción de «gesto lamentable» y ha comentado que «no va solo dirigido a la población ucraniana sino también a los valores fundamentales de la República Checa», según ha reportado Radio Prague International.
Actualmente, junto a la bandera checa, también se izan las banderas de Israel y la Unión Europea en el edificio. La bandera ucraniana había sido colocada tras el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022.
Un episodio similar se ha producido en el Museo Nacional de Praga, donde la retirada de la bandera ucraniana ha desencadenado reacciones parecidas, aunque las autoridades han asegurado que dicha medida no posee connotaciones políticas.











