QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
Este miércoles, Donald Trump ha comenzado su segunda visita oficial al Reino Unido, siendo acogido por el rey Carlos III en el castillo de Windsor, situado al oeste de Londres. Al mismo tiempo, una multitud considerable ha tomado las calles para manifestarse en contra de las políticas implementadas por el presidente estadounidense desde su reciente regreso a la Casa Blanca a principios de este año.
Los manifestantes se han congregado portando carteles con frases como “el pueblo de Reino Unido no da la bienvenida al fascista de Trump”, “aviso policial: Trump, vete a casa; no te queremos aquí” o “quita las manos de nuestra democracia”. Además, han llevado globos representando al mandatario como un bebé enfadado en pañales.
Asimismo, han expresado su rechazo al apoyo de Estados Unidos hacia Israel, con mensajes que claman “poner fin al genocidio” en la Franja de Gaza, donde más de 65.000 palestinos han perdido la vida desde que el Ejército israelí comenzara su ofensiva en octubre de 2023, y exigen “dejar de dar armas a Israel”. Bajo el lema “No al sionismo, paremos el terrorismo estadounidense e israelí”, los protestantes han hecho oír su voz.
Entre banderas palestinas y máscaras de Trump y de figuras como el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el presidente ruso, Vladimir Putin, los manifestantes han desfilado con carteles que los señalan como “asesinos con Trump” y “criminales de guerra con Trump”. La manifestación ha sido organizada por la ‘Stop Trump Coalition’, compuesta por más de 50 organizaciones, incluyendo grupos climáticos, antirracistas y propalestinos. A pesar de la presencia de algunos partidarios de Trump que lo han defendido como “el mejor presidente”, la protesta se ha desarrollado pacíficamente, aunque se han reportado cuatro detenciones vinculadas a un incidente nocturno en el castillo de Windsor.
En el ámbito de su visita, Trump ha compartido un almuerzo con la familia real, intercambiando regalos y visitando una exposición sobre las relaciones bilaterales entre Washington y Londres. A pesar de la cancelación de un vuelo conjunto debido al clima, Trump y Carlos III han observado juntos la exhibición aérea de los ‘Red Arrows’, concluyendo el evento con saludos al personal militar junto a sus respectivas parejas.
