El canciller egipcio, Badr Abdelati, declaró el viernes que el desplazamiento, ya sea voluntario o forzoso, «no es una opción» para los habitantes de la Franja de Gaza, calificándolo como una «línea roja» en medio de la ofensiva israelí en el territorio, que ha resultado en la muerte de 64,300 personas.
Abdelati, quien afirmó que Egipto «no va a tolerar el desplazamiento en masa de los palestinos» y denunció las acciones como parte de un «genocidio», se pronunció en contra de estas prácticas durante una conferencia de prensa en Nicosia, Chipre. Reiteró que los desplazamientos son la «liquidación» y el «final» de la causa palestina y destacó que «no existe motivo legal o ético alguno para echar a la gente de su tierra», según un comunicado.
El ministro subrayó que la situación en la Franja se ha discutido durante el último año, pese a los esfuerzos de mediación de Egipto con Qatar y Estados Unidos para un cese al fuego. «Lo que está pasando sobre el terreno va más allá de lo imaginable. Es un genocidio, un asesinato en masa de civiles, los israelíes han creado una hambruna», enfatizó Abdelati, condenando estas acciones como «una flagrante violación del Derecho Internacional y una limpieza étnica».
Además, exhortó a la comunidad internacional a establecer «mecanismos contra la impunidad» y concluyó diciendo: «Egipto nunca será parte de esta injusticia mediante la liquidación de la causa palestina dando a los palestinos un lugar hasta el que desplazarse».
















