El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha cerrado este lunes un acuerdo de intenciones con Francia para la adquisición de un centenar de aviones de combate Rafale F4 y otros equipos militares para los siguientes diez años, aunque queda la incertidumbre de si los cazas llegarán a Kiev antes de que finalice el conflicto actual.
La firma del acuerdo tuvo lugar en la base militar de Villacoublay, en la región parisina, un evento que Zelenski calificó como “especial y verdaderamente histórico para ambas naciones”, según palabras recogidas en un comunicado de la Presidencia ucraniana.
Además de los cazas Rafale F4, el contrato incluye la compra de sistemas de defensa SAMP/T, radares, misiles y bombas guiadas, y prevé una colaboración entre las industrias armamentísticas y tecnológicas francesas y ucranianas.
El coste de cada avión de combate se estima entre 70 y 80 millones de euros, lo que elevaría el valor total del acuerdo a entre 7.000 y 8.000 millones de euros. En octubre, Zelenski también firmó un acuerdo con Suecia para la adquisición de 150 cazas adicionales.
Ucrania planea fortalecer su flota aérea con al menos 250 aviones modernos para contrarrestar la avanzada flota rusa, subrayando la importancia de estos recursos en el arsenal ucraniano durante el conflicto. Macron ha señalado que este acuerdo es “necesario” para asegurar la fortaleza del Ejército ucraniano en el futuro, incluso si se alcanza la paz con Rusia “mañana”.










