El Ejército israelí ha informado de que varios soldados pertenecientes a una de las unidades de la Brigada de Paracaidistas fueron arrestados y posteriormente sometidos a juicio militar tras acceder sin autorización el pasado sábado a la localidad palestina de Deir Dibuán, situada al este de Ramala, donde causaron daños a varios vehículos de residentes en esta zona de Cisjordania.
“Todos los soldados involucrados han sido juzgados y castigados”, han detallado las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en un comunicado, agregando que “ninguno de los comandantes involucrados en el incidente regresará a sus puestos de mando”.
El comunicado califica el episodio de “grave” y subraya que “contradice los valores” y el “profesionalismo” exigidos a las tropas. La propia institución castrense ha llevado a cabo una investigación interna que ha concluido con la imposición de arresto militar a los comandantes de escuadrón implicados, así como a otro soldado de la Brigada Binyamin señalado como el iniciador de los actos vandálicos.
“Las fuerzas de las FDI, en cooperación con todo el aparato de seguridad, operan para garantizar la seguridad de todos los residentes”, ha dicho, agregando que espera que “los combatientes de las FDI actúen conforme a los valores y procedimientos”.
Las primeras conclusiones de esta investigación han sido trasladadas al jefe del Estado Mayor, el teniente general Eyal Zamir, quien ha ordenado la apertura de una pesquisa más amplia que abarque a nivel de compañía y batallón. Está previsto que en los próximos días se presenten nuevos resultados sobre lo ocurrido.