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Pezeshkian admite las demandas de las protestas en Irán y ordena abrir un diálogo con los manifestantes

Pezeshkian reconoce las demandas de las protestas en Teherán, ordena dialogar con los manifestantes y afronta una grave crisis económica y social.

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Masud Pezeshkian, presidente de Irán. Europa Press/Contacto/Iranian Presidency Office  a

Masud Pezeshkian, presidente de Irán. Europa Press/Contacto/Iranian Presidency Office a

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El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, ha admitido este martes las “legítimas demandas” de la ciudadanía tras dos jornadas de movilizaciones en las calles de Teherán, y ha instado a los responsables del Ejecutivo a mantener encuentros con los portavoces de los manifestantes y a comportarse con responsabilidad.

“El sustento de la población es mi preocupación diaria. Tenemos medidas fundamentales en agenda para reformar el sistema monetario y bancario y preservar el poder adquisitivo de la población”, ha escrito en X.

Por este motivo, ha explicado, ha ordenado al ministro del Interior, Eskandar Momeni, que atienda las reclamaciones de los manifestantes “mediante el diálogo (...) para que el Gobierno pueda actuar con responsabilidad y con todas sus fuerzas para resolver los problemas”.

En los últimos días, las principales avenidas de Teherán, la capital, se han llenado de protestas y paros de comerciantes por el empeoramiento de la situación económica de amplios sectores, la crisis energética, la falta de agua y el deterioro urbano, con ciudades cada vez más contaminadas.

Las fuerzas antidisturbios recurrieron a gases lacrimógenos para dispersar algunas de las concentraciones de este lunes, originadas por el profundo malestar social ante la coyuntura económica del país, visible en un nuevo desplome de la moneda nacional, el rial, que estos días ha marcado mínimos históricos.

La pérdida de poder adquisitivo de millones de iraníes coincide con un incremento de las presiones y sanciones económicas de Estados Unidos que, junto a Israel, ha vuelto a centrar sus críticas en el programa nuclear iraní y ha llevado a cabo bombardeos, como los del pasado junio, en los que murieron unas mil personas.