El Senado de Indiana ha rechazado este jueves una nueva redistribución de distritos electorales impulsada por los republicanos, pese a que su mayoría ha sido decisiva en la votación, lo que representa un serio revés político para el promotor del plan, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
La iniciativa del mandatario estadounidense se ha saldado con un sonoro fracaso al lograr únicamente el respaldo de 19 senadores frente a 31, después de que 21 republicanos se alinearan con diez demócratas para bloquear la propuesta.
La negativa a un nuevo mapa electoral en Indiana constituye un golpe para el inquilino de la Casa Blanca, que en las últimas semanas había presionado de forma reiterada a los legisladores de su formación, entre ellos al líder del Senado estatal de Indiana, Rodric Bray, para que respaldaran el rediseño de los distritos. “Rod Bray y sus amigos no estarán mucho tiempo en la política, y haré todo lo posible para asegurarme de que no vuelvan a perjudicar al Partido Republicano ni a nuestro país”, ha declarado en su cuenta de Truth Social.
Bray figura precisamente entre los republicanos que han votado en contra del proyecto y no se presentará a las elecciones previstas para 2026, según informa la cadena estadounidense NBC News.
Mientras tanto, los republicanos de Texas, Misuri y Carolina del Norte han dado luz verde a nuevos mapas electorales destinados a reforzar aún más al partido, y otros legisladores en estados como Florida podrían sumarse en breve a una estrategia que busca consolidar la ajustada mayoría de la formación en la Cámara de Representantes de Estados Unidos.











