El equipo legal del exmandatario brasileño Jair Bolsonaro ha solicitado al Tribunal Supremo Federal que permita que Bolsonaro cumpla su condena de 27 años y tres meses bajo arresto domiciliario, alegando razones humanitarias. Esta petición se produce justo antes de que el juez Alexandre de Moraes tome una decisión sobre su encarcelamiento.
Los letrados de Bolsonaro han expresado su preocupación por la seguridad y salud del expresidente en la Penitenciaría de Papuda, describiendo el lugar como un “riesgo concreto e inmediato para su integridad física y su vida misma”. Destacan que su condición de salud es “extremadamente delicada” a raíz de varias enfermedades, exacerbadas por un ataque sufrido en 2018 durante su campaña electoral.
El lunes, la Primera Sala del alto tribunal rechazó las solicitudes de aclaración presentadas por la defensa, que buscaban resolver dudas sobre los argumentos del fallo anterior.
Bolsonaro ha sido condenado por organizar un esquema para mantenerse en el poder, incluyendo delitos como golpe de Estado y constitución de una organización criminal armada. La sentencia también implica su inhabilitación política hasta ocho años después de cumplir su condena, que finalizaría en 2060, cuando Bolsonaro tendría, teóricamente, 105 años.










