Keith Kellogg, el representante especial de Estados Unidos para Ucrania, ha expresado su consternación ante el reciente y devastador ataque perpetrado por Rusia en Kiev, destacando que estas ‘atrocidades’ comprometen las iniciativas de paz del presidente Donald Trump. Kellogg ha descrito este asalto a la capital ucraniana como el segundo mayor de la guerra, indicando que se emplearon 600 drones y cerca de 30 misiles. ‘¿Los objetivos? No eran soldados ni armas, sino zonas residenciales de Kiev’, criticó el delegado de Trump.
Además, Kellogg señaló que se han visto afectadas otras estructuras civiles, incluyendo sedes diplomáticas de la Unión Europea y un centro cultural británico. ‘Estos atroces ataques amenazan la paz que el presidente Donald Trump está buscando’, afirmó.
Los ataques nocturnos en Kiev han resultado en la muerte de 19 personas y más de 60 heridos hasta ahora, aunque se espera que estas cifras aumenten conforme avanzan las operaciones de rescate y emergencia.
Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, ha declarado que con estos nuevos ataques, Rusia demuestra de nuevo su desinterés por la paz y ha pedido a la comunidad internacional que aumente las sanciones. ‘Sólo entienden de fuerza y presión. Por cada ataque, debe sufrir las consecuencias’, manifestó.
Rusia, por su lado, ha justificado los ataques alegando que han sido dirigidos con éxito hacia ‘empresas del complejo militar-industrial y bases aéreas en Ucrania’.
















