La presidenta de Cantabria y líder del PP en la comunidad, María José Sáenz de Buruaga, ha vuelto a advertir este sábado de que no le va a “templar la mano” a la hora de convocar elecciones anticipadas, incluso si eso implica repetir los comicios en 2027, en el caso de que la oposición (PRC, PSOE y Vox) persista en su intento de “articular un gobierno en la sombra”.
“Yo no tengo miedo a las urnas y mucho menos tengo miedo a la libertad, salga lo que salga”, ha recalcado durante su intervención en la tradicional comida de Navidad del PP, celebrada en el Hotel Milagros Golf de Mogro (Miengo), un acto que ha congregado a cerca de un millar de asistentes entre alcaldes, concejales, diputados autonómicos, miembros del Ejecutivo, afiliados y simpatizantes.
En este contexto festivo, Buruaga ha formulado como deseo navideño que “vuelva la buena voluntad a la política regional”, en un momento en el que los Presupuestos para 2026 se encuentran “bloqueados” por “puro egoísmo y por propio interés electoral”. A su juicio, esta situación responde a que el cambio impulsado por su Gobierno “le ha sentado muy bien” a Cantabria pero “muy mal a los demás partidos”, que “están intentando bloquear Cantabria con una pinza absurda”, ya que “ante cualquier avance la rabia les carcome”.
Aun así, la presidenta ha expresado su confianza en que “el espíritu de la Navidad haga su efecto” en el PRC y finalmente “se imponga el sentido de la responsabilidad” para permitir la aprobación de las cuentas. Considera que este giro “no descarta” porque “nadie entiende” el rechazo actual de los regionalistas, una postura que interpreta como “un salto al vacío que puede llevarles a su propia descomposición”.
“Lo piensan un gran número de alcaldes regionalistas y es un clamor en la calle”, ha señalado, después de que algunos regidores hayan amenazado con abandonar el partido por este motivo. “Quiero creer que van a terminar dándose cuenta de que se han equivocado en los cálculos políticos”, ha remachado la dirigente ‘popular’, que opina que, en estos momentos, los regionalistas solo están centrados “en el poder, no en el bienestar de los cántabros”, y en “especulaciones” sobre cómo lograr “unos escaños más o menos”, lo que, a su entender, hace que “han dejado de ser un partido útil a la región”.
Además, ha pronosticado que “el único que va a sacar rédito de esta artimaña es el PSOE”.
En su intervención, también ha dirigido sus críticas a Vox, formación a la que ha definido como “la muleta de Pedro Sánchez en Cantabria” y a la que acusa de llevar a cabo “maniobras teledirigidas desde Madrid por unos señores que juegan al ajedrez con el futuro de los cántabros”. “Que nadie se equivoque con Vox porque no quiere achar a Pedro Sánchez del poder, quiere desplazar al PP”, ha añadido.
Defensa del PP como única alternativa “real”
Por todo ello, Buruaga ha reivindicado al PP como “el primer partido de España” y “la única alternativa real” para lograr que “el sanchismo se vaya”. En esa línea, ha expresado su deseo de poder celebrar la Navidad de 2026 “con un horizonte de convivencia y no de división, de eficacia y no de desgobierno, de respeto y no de abuso de las instituciones democráticas”.
“Hay otro camino para España”, ha proclamado, tras aludir a la “oleada de denuncias por acoso sexual”, a la “corrupción política, económica, institucional y moral del sanchismo” y a “su” fiscal general del Estado “condenado por delinquir, porque es un delincuente”. “¿Y todavía tenemos que creernos que el presidente es ajeno a todo y que nada le concierne cuando nada de esto podría haber pasado sin él?”, ha planteado.
Después de censurar el “feminismo de pancarta” del PSOE y de presentarlo como el partido que “tapa a un presunto acosador sexual e impone el silencio en sus filas”, la presidenta ha lamentado que “eso también lo hemos visto aquí en Cantabria” en relación con la portavoz socialista, Ainoa Quiñones, a quien ha acusado de haber permanecido “callada como un muerto ante todo lo que estaba ocurriendo”.
Frente a “todo esto nauseabundo”, ha instado a “abrir un nuevo tiempo de limpieza, honestidad y servicio público” de la mano del PP, con el que, según ha defendido, “Cantabria ha avanzado en los dos últimos años más que en las dos legislaturas anteriores”, gracias a “las reformas y las decisiones valientes”.
Asimismo, ha subrayado que su formación no admite “lecciones de nadie cuando se trata de mejorar los servicios esenciales”. En este sentido, ha puesto en valor que Cantabria dispone de una plantilla docente “entre las mejor pagadas de este país” y que ocupa la tercera posición en el último barómetro de satisfacción con el sistema sanitario público.











