El Congreso ya cuenta con la notificación del Tribunal Supremo que ratifica el auto de procesamiento del exministro José Luis Ábalos, en prisión preventiva desde el pasado 28 de noviembre. Con este trámite completado, la Mesa de la Cámara tiene previsto aplicar este mismo miércoles el precepto del Reglamento que, a la vista de su situación procesal, le deja sin el ejercicio de sus derechos parlamentarios, entre ellos el voto y la percepción de su salario.
Se trata del artículo 21 del Reglamento, que señala que “los diputados y diputadas quedarán suspendidos en sus derechos y deberes parlamentarios cuando, concedida por la Cámara la autorización objeto de un suplicatorio y firme el auto de procesamiento, se hallaren en situación de prisión preventiva y mientras dure ésta”.
Después de que el juez Leopoldo Puente ordenara el ingreso en prisión de Ábalos, la Presidencia del Congreso remitió un escrito al Tribunal Supremo para que certificase formalmente esa situación penitenciaria y poder activar así el mecanismo de suspensión del escaño. En su contestación, el Alto Tribunal confirmó que se había acordado “la prisión provisional comunicada y sin fianza” para Ábalos, pero puntualizó que el auto de procesamiento aún no era firme, al estar recurrido en apelación por su defensa, cuya deliberación se fijó para el pasado día 4.
Este miércoles, la Sala de Apelación del Tribunal Supremo ha respaldado la resolución del magistrado instructor que acordó procesar a Ábalos y a su exasesor en el Ministerio, Koldo García, por supuestas irregularidades en los contratos de mascarillas adjudicados por el Ministerio de Transportes durante la pandemia.
Poco después de conocerse esa decisión, el exministro comunicaba en su cuenta de ‘X’ que había registrado una petición para que se le permita votar a distancia amparándose en el artículo 82.2 del Reglamento del Congreso, que contempla el caso de “situaciones excepcionales de especial gravedad”.
Ábalos subrayaba que la norma no concreta cuál debe ser la causa de esa situación excepcional, pero entiende que su actual condición de preso preventivo se ajustaría a ese supuesto. Por ello ha optado por solicitar el voto telemático mientras continúe siendo diputado y conserve todos sus “derechos, deberes y prerrogativas parlamentarias intactas”.
Sin embargo, todo indica que no habrá margen para que se resuelva su solicitud de emitir el voto desde prisión, ya que la Cámara Baja ha recibido ya la comunicación del Supremo que otorga firmeza al auto de procesamiento. Con esa confirmación, la Mesa aplicará el artículo reglamentario que conlleva la suspensión automática del parlamentario, lo que implica la pérdida del voto y del sueldo mientras dure la prisión preventiva.











