En el reciente debate plenario del Congreso, el PSOE junto con sus socios han expresado su desacuerdo con la Ley de Conciliación y Corresponsabilidad Familiar presentada por el Partido Popular, argumentando que esta ‘retrocede’ en términos de ‘igualdad’ y omite a las familias lgtbi, además de ‘invadir’ competencias de las comunidades autónomas.
La diputada del PP, Carmen Fúnez, defendió la ley como ‘una ley social y valiente’ y enfatizó que la conciliación es ‘un derecho, no un privilegio’. Detalló medidas como la educación gratuita de 0 a 3 años, compartida entre el Estado y las comunidades, y la extensión del permiso de paternidad a 20 semanas, ya contemplado en un decreto reciente.
Desde la oposición, el diputado del PSOE Lázaro Azorín criticó la propuesta como un intento de ‘marketing’ y señaló la falta de mención a las familias lgtbi en la ley. Rocío de Meer de Vox, aunque apoyó la iniciativa, criticó la actitud del PP, y Lander Martínez de Sumar y Jordi Salvador i Duch de ERC resaltaron los retrocesos y las invasiones competenciales que, a su juicio, caracterizan la ley.
Representantes de Junts, EH Bildu, PNV, Podemos, Coalición Canaria, UPN y Compromís también expresaron su preocupación por diferentes aspectos del texto, desde la visión desactualizada hasta la falta de reducción de la jornada laboral para facilitar la conciliación.