El Consell de Mallorca ha desestimado una propuesta del grupo socialista que solicitaba al Govern la declaración de Baleares como zona de tensión residencial para poder establecer un límite a los precios del alquiler.
Joan Ferrer, conseller del PSIB, ha expresado que esta negativa por parte del gobierno insular, formado por PP y Vox, representa “una insumisión de la derecha y la ultraderecha al derecho a la vivienda digna de la ciudadanía”.
En un comunicado del PSIB, Ferrer ha argumentado que la limitación de precios del alquiler, según la ley estatal de vivienda, ya ha sido eficaz en otras regiones españolas. “Es una medida complementaria que se suma a las que ya se están aplicando y que permitiría un mercado más transparente en el que ganara la ciudadanía y perdiera la especulación”, ha subrayado.
Por otro lado, los socialistas también han propuesto, aunque sin éxito, que el Triángulo de Galatzó no se dedique a servicios y equipamientos privados sino a viviendas sociales. Joan Méndez, otro conseller socialista, ha apelado al Consell para “actuar para garantizar el equilibrio entre el crecimiento económico y el derecho a la vivienda” integrando este área de 130.000 metros cuadrados en la cuarta modificación del Plan Territorial Insular de Mallorca.
Representantes de las asociaciones de vecinos de Galatzó asistieron al pleno para respaldar esta medida, mientras que desde el PP se les ha acusado de «estar manipulados», según fuentes del PSIB.
ADAPTACIÓN A LA EMERGENCIA CLIMÁTICA
Además, el grupo socialista ha defendido otra moción para adaptar los términos del Pacto de Estado para la Emergencia Climática a la situación de Mallorca, aunque esta tampoco fue aprobada.
La propuesta incluía el reconocimiento de la emergencia climática, la asignación de recursos y la apertura del pacto a la sociedad mallorquina. “No nos cansaremos de hacer propuestas en positivo para llegar a una protección real y hacer frente a los efectos reales del cambio climático y defendiendo los compromisos globales en esta materia”, ha declarado el conseller Jaume Mateu.
Mateu ha criticado la postura del PP y Vox, tildándola de “inverosímil” y les ha acusado de “refugiarse en las tesis negacionistas del cambio climático”, citando palabras del vicepresidente segundo del Consell, Pedro Bestard.











