La Mesa del Congreso ha decidido este martes incoar un nuevo expediente disciplinario a un segundo informador acreditado en la Cámara Baja, en esta ocasión a raíz de una denuncia presentada por la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP). Se le acusa de haber tomado imágenes con su teléfono móvil y sin autorización en dependencias parlamentarias. La resolución ha salido adelante con los votos favorables de PSOE y Sumar y la oposición del PP, según han indicado a Europa Press fuentes parlamentarias.
El periodista afectado es Vito Quiles, del medio 'Estado de Alarma'. El pasado 20 de noviembre grabó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuando abandonaba la Sala Constitucional del Congreso, tras la presentación de la serie de ficción 'Anatomía de un instante', basada en el libro del mismo nombre de Javier Cercas sobre la Transición Española y el intento fallido de golpe de Estado del 23F.
PODRÍAN ABRIRLE UN SEGUNDO EXPEDIENTE
Además, Quiles se expone a un posible segundo expediente por unos hechos posteriores. La semana pasada volvió a utilizar su móvil para captar imágenes mientras formulaba preguntas al expresidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero, que se encontraba en el Congreso para la presentación de los discursos de quien fuera su vicepresidente y ministro Alfredo Pérez Rubalcaba.
El Reglamento del Congreso especifica que únicamente los profesionales de medios acreditados como reporteros gráficos u operadores de televisión están facultados para grabar en el interior de la Cámara. Los redactores tienen prohibido tomar imágenes “en ningún caso”. Asimismo, se subraya que cualquier tipo de grabación debe contar de forma previa con la autorización de la Dirección de Comunicación.
LA SEMANA PASADA, EL PRIMER EXPEDIENTADO
Días antes, la Mesa ya había acordado abrir un primer expediente al periodista Bertrand Ndongo, de 'Periodista Digital'. En su caso, fue Sumar quien presentó la denuncia por intervenir sin turno para plantear sus cuestiones a la portavoz parlamentaria, Verónica Martínez Barbero, interrumpiendo de forma reiterada la rueda de prensa y a quien tenía el uso de la palabra en cada momento.
El expediente a Ndongo fue la primera actuación registrada tras la entrada en vigor de las nuevas normas internas aprobadas por el Congreso para regular la actividad de los profesionales de los medios acreditados. Este martes, la Mesa ha designado a la persona responsable de instruir ese procedimiento.
Sumar le atribuye una conducta que el Reglamento del Congreso califica como infracción grave --“obstruir o interrumpir el orden de las ruedas de prensa o demás encuentros de los miembros de la Cámara con los representantes de los medios de comunicación”--, una falta que puede acarrear la suspensión de la acreditación entre once días y tres meses.
QUÉ DICE EL REGLAMENTO
De acuerdo con las normas parlamentarias, una vez se abre un procedimiento sancionador, el funcionario instructor debe analizar las pruebas disponibles y remitir su informe al Consejo Consultivo de Comunicación Parlamentaria (CCCP). Este órgano se constituyó hace una semana y está integrado por representantes de todos los grupos parlamentarios, salvo PP y Vox, que han decidido no participar. También acuden con voz, pero sin voto, miembros de asociaciones profesionales.
El Consejo dispone de un plazo máximo de quince días para emitir un dictamen sobre los hechos o comportamientos denunciados. Concluido ese informe, o transcurrido el plazo sin que se haya emitido, el expediente regresa a la Mesa del Congreso, que es el órgano que adopta la resolución definitiva y que cuenta con un periodo de hasta seis meses para pronunciarse.