QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, no estará presente en la sesión de control al Ejecutivo en el Senado programada para el próximo martes 30 de septiembre, a pesar de las críticas del Partido Popular debido a sus continuas ausencias. En su lugar, tomará la palabra María Jesús Montero, vicepresidenta primera y ministra de Hacienda.
Desde Moncloa se ha confirmado a Europa Press que Sánchez no comparecerá esta semana en la Cámara Baja, donde no ha estado presente durante más de 18 meses, a pesar de una queja formal del PP que solicitaba su asistencia.
Alicia García, portavoz del PP en el Senado, ha expresado su descontento a través de una carta enviada el viernes a Sánchez, criticando su falta de compromiso con el control parlamentario, especialmente tras una modificación en el reglamento de la Cámara que ahora le exige comparecer y responder a las preguntas de la oposición al menos una vez al mes.
Moncloa, haciendo referencia al artículo 108 de la Constitución, ha declarado que cumplirán con su responsabilidad constitucional de responder ‘solidariamente’ ante el Parlamento a través de la comparecencia de Montero, quien responderá a todas las preguntas de los senadores.
EL GOBIERNO LO VE INCONSTITUCIONAL
El Gobierno ha manifestado su desacuerdo con la reforma del reglamento, que incluye varios artículos, y ha presentado un recurso ante el Tribunal Constitucional este mes de septiembre. Sin embargo, este recurso no impugna el apartado que exige la comparecencia periódica de Sánchez.
En dos años de legislatura, Sánchez solo ha asistido una vez al Senado, el 12 de marzo de 2024, y ha citado conflictos de agenda como motivo de sus ausencias. Moncloa ha insinuado que Sánchez no se siente respetado por la mayoría del PP en el Senado. En respuesta, el PP ha endurecido las normas internas para obligar a Sánchez a cumplir con su deber de comparecencia, aunque hasta ahora ha sido en vano.
La portavoz del PP ha criticado duramente la conducta de Sánchez, comparando sus visitas a China con su falta de compromiso con el control parlamentario y acusándole de hacer de la ‘mentira y el incumplimiento su costumbre’.
En la carta a Sánchez, el PP le recuerda que su obligación de comparecer tiene carácter de ley y no es una mera formalidad, sino una ‘exigencia democrática’.
