Vox ha calificado como “ridícula” la demanda del PSOE para que el Tribunal de Cuentas ejecute una auditoría específica sobre la Fundación Disenso, liderada por Santiago Abascal, durante el período 2020-2025. Desde Vox, recuerdan que la entidad ya ha aprobado los informes financieros de la fundación correspondientes a los años 2020, 2021 y 2022, sin reportar anomalías.
“Están desesperados”, declaró José Antonio Fúster, portavoz de Vox, en relación a la solicitud de fiscalización presentada por los socialistas en el Congreso, que será discutida próximamente en la Comisión Mixta de relaciones con el Tribunal de Cuentas.
El PSOE solicita una Fiscalización Especial urgente sobre las cuentas de ingresos y egresos de la Fundación de Vox entre 2020 y 2025, “analizando la naturaleza, origen y destino de los fondos recibidos, corrección de su contabilización y justificación”.
LA DENUNCIA DE EX CARGOS DE VOX EN BALEARES
Esta iniciativa busca profundizar en las acusaciones hechas por varios antiguos dirigentes de Vox en Baleares, quienes alegan un posible desvío de fondos de los grupos parlamentarios hacia la fundación de Abascal, acusándolo de intentar “forrarse”. Desde Vox enfatizan que dichas contribuciones de entidades institucionales son comunes en todos los partidos y niegan cualquier falta.
Las fundaciones asociadas a partidos políticos están sujetas a una fiscalización anual por el Tribunal de Cuentas, dado que reciben financiación pública.
En su más reciente revisión, correspondiente a 2021 y 2022, el Tribunal de Cuentas no encontró irregularidades en las cuentas de Disenso, que es la líder en número de contribuciones privadas, mayoritariamente realizadas por Vox.
En una conferencia de prensa en la sede de Vox, Fúster criticó que el PSOE haya solicitado una fiscalización especial de su fundación justo cuando el Tribunal de Cuentas ya ha revisado y aprobado sus estados financieros, sin detectar “ningún incumplimiento ni incidencia”. “Esta petición del Partido Socialista es doble o triplemente ridícula”, afirmó.
Fúster considera que el bipartidismo se muestra “nervioso” y “desesperado”. “La desesperación es mala consejera”, advirtió, cuestionando si el Tribunal de Cuentas ha investigado “los pagos a las prostitutas de la mano derecha de Pedro Sánchez”, refiriéndose a José Luis Ábalos, o el trabajo de la asesora de Begoña Gómez o los meses que el hermano del presidente estuvo “escondido” en Moncloa.