El Comité Asesor sobre Prácticas de Salud (PRAC), parte de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), ha emitido una advertencia dirigida a los profesionales de la salud sobre la necesidad de extremar precauciones al usar ácido tranexámico inyectable. Es crucial asegurarse de que este medicamento solo se administre por vía intravenosa, pues cualquier otro modo de administración puede desencadenar serias reacciones adversas.
No se debe administrar por vía intratecal, epidural, intraventricular ni intracerebral. La administración intratecal puede ocasionar efectos adversos graves, tales como dolor intenso en espalda, glúteos y piernas, convulsiones y arritmias cardíacas, llegando incluso a ser fatal en algunos casos.
El ácido tranexámico, utilizado para prevenir y tratar hemorragias en adultos y niños mayores de un año, ha sido objeto de revisión por parte del PRAC tras identificar casos de administración errónea en la Unión Europea, donde se confundió con anestésicos locales.
Se insta a los profesionales sanitarios a tomar medidas preventivas para evitar confusiones entre el ácido tranexámico y otros medicamentos inyectables, especialmente los utilizados en anestesia intratecal. Para minimizar estos riesgos, se recomienda que las jeringas con ácido tranexámico estén claramente etiquetadas para uso exclusivamente intravenoso y que se almacenen de manera separada de los anestésicos locales.
Adicionalmente, se actualizarán las indicaciones en el embalaje de los productos inyectables de ácido tranexámico para subrayar que deben ser administrados únicamente por vía intravenosa.















