En el contexto del 46 Congreso de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) y el 39 Congreso de la Sociedad Andaluza de Medicina Interna (SADEMI), los especialistas en medicina interna han instado a que se realicen las mismas evaluaciones cardíacas en mujeres que en hombres, destacando la importancia de estas pruebas antes del embarazo y durante la menopausia como una medida de prevención primaria eficaz contra los eventos cardiovasculares.
“Actualmente, las campañas de prevención cardiovascular no están suficientemente enfocadas a las mujeres, hoy infraestudiadas en los ensayos clínicos. Además, la misma mujer tiene una baja percepción de los factores de riesgo cardiovascular y de la clínica de los distintos eventos cardiovasculares”, declaró Almudena Hernández Milián, doctora del Servicio de Medicina Interna del Hospital Son Llàtzer en Mallorca.
Según Hernández, es crucial realizar estas pruebas debido a los numerosos cambios fisiológicos que sufre la mujer, como la alteración en la distribución de la grasa, el aumento de peso y otros cambios metabólicos, que ocurren principalmente durante el embarazo y la menopausia. Hernández también señaló que las mujeres enfrentan un 6% más de muertes por causas cardiovasculares en comparación con los hombres y están menos representadas en los estudios clínicos.
“Dos falsos mitos de la salud cardiovascular de la mujer son las ideas de que, por su fisiopatología, está protegida de tener eventos cardiovasculares y que, al tener el colesterol HDL más elevado, estarían menos expuestas a estos eventos. Otro dato es que la población desconoce las diferencias clínicas entre los eventos cardiovasculares en el hombre y en la mujer”, agregó la especialista.
Los principales factores de riesgo, según Hernández, incluyen la hipertensión, la diabetes, la dislipemia, el ovario políquístico, los abortos, los partos prematuros, el tabaquismo, la obesidad, la ansiedad o las enfermedades autoinmunes, que deben ser monitoreados desde la Medicina Interna a través de una evaluación completa de la historia clínica, una exploración física y la realización de pruebas complementarias, dependiendo de los resultados.
EL RIESGO CARDIOVASCULAR DURANTE EL EMBARAZO
Los profesionales médicos destacan que durante el embarazo, el sistema cardiovascular de la mujer sufre transformaciones significativas, incrementando el gasto cardíaco y provocando una relajación de las arterias maternas por el efecto hormonal necesario para nutrir al feto adecuadamente. Pascual Císcar Fernández, médico del Servicio de Medicina Interna del Hospital Universitario la Fe en Valencia, explicó que ciertos factores durante la formación de la placenta pueden causar que las arterias uterinas suministren insuficiente sangre al feto, lo que puede desencadenar la liberación de sustancias de alarma en la sangre materna, causando daños en órganos y complicaciones como la hipertensión gestacional o la preeclampsia.
Estos problemas afectan entre un 5 y un 10% de los embarazos y pueden estar relacionados no solo con condiciones preexistentes de la madre, sino también con tratamientos hormonales y técnicas reproductivas asistidas. Císcar señaló que los problemas arteriales pueden persistir después del embarazo y que los resultados adversos durante este periodo se consideran factores de riesgo emergentes para diversas enfermedades en la madre a medio y largo plazo, y pueden incluso afectar la salud cardiovascular de los hijos en el futuro.
Finalmente, Císcar enfatizó la importancia de llegar al embarazo con la enfermedad controlada en mujeres con factores de riesgo conocidos, detectados a través de un cribado de preeclampsia en el primer trimestre, lo que permite iniciar tratamientos preventivos y combinarlos con una dieta balanceada y ejercicio regular durante la gestación.