El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha señalado la adopción del Acuerdo sobre Pandemias como el principal hito de 2025, un ejercicio marcado por los recortes en la ayuda internacional que ponen en riesgo décadas de avances en salud materna, programas de vacunación, prevención del VIH y sistemas de vigilancia epidemiológica.
En su repaso del año que termina, el organismo ha centrado la atención en el primer Acuerdo sobre Pandemias, aprobado en mayo durante la 78ª Asamblea Mundial de la Salud, así como en el nuevo Reglamento Sanitario Internacional, remarcando que ambos instrumentos permitirán una reacción más rápida, justa y eficaz ante futuras crisis sanitarias.
La OMS ha recordado que el acuerdo contempla también la creación de un sistema de intercambio de patógenos para reforzar la investigación y la preparación ante brotes, una propuesta que se concretará el próximo mes de mayo en la 79ª Asamblea Mundial de la Salud. Para la institución, esta medida representa una “oportunidad histórica” para reforzar la seguridad sanitaria a escala global.
En su balance anual, la agencia ha reivindicado su papel de referencia mundial frente a los retos de salud pública, con la evidencia científica como guía. Entre las “victorias” de 2025, ha destacado la eliminación de diversas enfermedades en varios países y la ampliación de la cobertura vacunal a nivel internacional.
Este año, Maldivas se ha convertido en el primer país en alcanzar la triple eliminación de la transmisión de madre a hijo del VIH, la sífilis y la hepatitis B. Brasil también ha sido reconocido por erradicar la transmisión vertical del VIH, convirtiéndose en el país más poblado de las Américas en lograr este objetivo.
Asimismo, Burundi, Egipto y Fiyi han conseguido eliminar el tracoma; Guinea y Kenia, la enfermedad del sueño; y Níger, la ceguera de los ríos. A su vez, Georgia, Surinam y Timor Oriental han recibido la certificación como países libres de malaria.
En el ámbito de la inmunización, la OMS ha precisado que ya son 24 los países que disponen de vacunas contra la malaria, después de que siete naciones africanas las hayan incorporado en 2025. También ha puesto en valor el refuerzo de los programas de vacunación contra la meningitis, la enfermedad neumocócica, la poliomielitis, el rotavirus y el virus del papiloma humano (VPH).
En relación con el VPH, ha señalado que Bután, Brasil, China, Indonesia, Nigeria, Tayikistán, Pakistán y Ruanda han ampliado la vacunación y el cribado, acercando al planeta al objetivo de eliminar el cáncer de cuello de útero, frente al que ya han sido inmunizadas 86 millones de niñas.
No obstante, la OMS ha admitido retrocesos en la protección frente a otras infecciones. El sarampión ha experimentado un incremento de casos respecto a la etapa anterior a la pandemia, mientras que la difteria, el tétanos y la polio afectan todavía a 20 millones de niños sin vacunar, debido a conflictos, problemas de suministro y al auge de la desinformación sobre las vacunas.
48 emergencias en 79 países y territorios
A lo largo de 2025, la OMS ha intervenido en 48 emergencias en 79 países y territorios, incluidas situaciones de conflicto y crisis prolongadas como Gaza, Sudán y Ucrania. Estas actuaciones han abarcado desde el apoyo a sistemas sanitarios desbordados hasta la atención de urgencia y la coordinación internacional para proteger a las poblaciones más vulnerables.
Mediante su fondo de contingencia para emergencias, la OMS liberó 29 millones de dólares (casi 25 millones de euros) para responder a crisis en 30 países durante este año. Gracias a los equipos médicos de emergencia respaldados por la organización, se realizaron 1,6 millones de consultas en contextos especialmente adversos.
El organismo ha rememorado igualmente su labor en Uganda frente al virus del Sudán, en la República Unida de Tanzanía y Etiopía ante brotes de la enfermedad por el virus de Marburgo, y en la República Democrática del Congo para contener un brote de ébola.
Además, ha resaltado que en septiembre se dio por concluida la emergencia sanitaria internacional por mpox. Se distribuyeron más de 1,1 millones de dosis de vacunas para proteger a las personas con mayor riesgo en 11 países africanos, responsables del 80 por ciento de los casos mundiales de mpox.
Avances frente a las enfermedades no transmisibles
La OMS ha puesto también el foco en los progresos contra las enfermedades no transmisibles (ENT), como las cardiovasculares, el cáncer, la diabetes, las patologías respiratorias crónicas y los trastornos de salud mental, que constituyen la principal causa de mortalidad, enfermedad y discapacidad en el mundo.
En este contexto, ha subrayado que, a mediados de diciembre, los líderes mundiales aprobaron en la Asamblea General de la ONU una declaración política que fija para 2030 tres metas: lograr 150 millones menos de consumidores de tabaco, 150 millones más de personas con hipertensión controlada y 150 millones adicionales con acceso a atención de salud mental.
Durante 2025, el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco ha cumplido 20 años. Este tratado abarca ya a más del 90 por ciento de la población mundial e incorpora medidas como espacios libres de humo, advertencias sanitarias gráficas y subidas de impuestos sobre los productos de tabaco.
La OMS ha publicado además varias directrices sustentadas en la evidencia para orientar la práctica clínica en el diagnóstico y tratamiento de la meningitis, la hemorragia posparto, la diabetes gestacional, el uso del método madre canguro para salvar a bebés prematuros, medicamentos oncológicos adaptados a la población infantil y recomendaciones para una escucha segura en videojuegos. También ha puesto en marcha el Foro Mundial de Ensayos Clínicos con el fin de impulsar una investigación ética e inclusiva.
Entre las últimas decisiones del año figura la adopción de la Estrategia Mundial de Medicina Tradicional 2025-2034, que pretende integrar estas prácticas en los sistemas sanitarios basándose en la evidencia científica, la seguridad y la calidad. El Segundo Foro Mundial sobre Medicina Tradicional, organizado junto a India, promovió soluciones de salud más sostenibles e inclusivas.
Mirando a 2026, la OMS ha reafirmado su compromiso de seguir trabajando para garantizar el nivel más alto posible de salud, concebido no como un privilegio, sino como un derecho humano universal.