Según Cristóbal Orellana, reumatólogo del Hospital Universitari Parc Taulí en Sabadell, la probabilidad de desarrollar artrosis, principalmente en las articulaciones de rodilla y cadera, se incrementa considerablemente en personas obesas, y se espera que este problema siga creciendo debido al envejecimiento poblacional y la creciente prevalencia de la obesidad.
Durante el V Curso de Artrosis organizado por la Sociedad Española de Reumatología y en colaboración con Grünenthal, Orellana explicó que “Se ha demostrado que el riesgo de sufrir artrosis en personas obesas puede aumentar entre 2 y 4 veces, especialmente artrosis de rodilla y cadera. Esto se debe tanto al mayor desgaste mecánico sobre las articulaciones que soportan carga como al efecto inflamatorio del tejido graso”.
Además, señaló que la obesidad no solo afecta a adultos mayores, sino también a jóvenes y adolescentes, acelerando el deterioro articular desde edades tempranas debido a la sobrecarga e inflamación. Orellana también comentó que el sobrepeso y la obesidad pueden reducir la efectividad de los tratamientos para la artrosis, ya que la inflamación del tejido adiposo puede disminuir la respuesta del cuerpo a ciertas terapias, complicando el control del dolor y la progresión de la enfermedad.
En este sentido, mencionó que la pérdida de peso es crucial para mejorar los resultados del tratamiento, al disminuir la carga sobre las articulaciones y mejorar la respuesta a la rehabilitación. “Aunque la artrosis ya establecida no desaparece, perder peso es una de las intervenciones más efectivas para evitar que avance y para recuperar parte de la función perdida”, destacó.
Por otro lado, Francisco J. Blanco, profesor de la Universidad de A Coriña, resaltó los recientes avances en la comprensión de la artrosis, que ha dejado de ser vista únicamente como un desgaste relacionado con la edad para ser comprendida como una enfermedad compleja con múltiples factores involucrados. “Ha habido avances en el conocimiento de los mecanismos del dolor; así como en los distintos fenotipos: artrosis relacionada con obesidad y síndrome metabólico, post-traumática, inflamatoria, rápida y agresiva, etcétera, lo cual ayuda a personalizar el tratamiento y la prevención”, agregó Blanco.
Blanco también enfatizó la relevancia del ejercicio terapéutico y la pérdida de peso como pilares del tratamiento para la artrosis de rodilla y cadera, y mencionó la investigación en biomarcadores que podría mejorar el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad. Además, advirtió sobre los riesgos de los tratamientos milagro sin fundamento científico que provocan gastos innecesarios y expectativas falsas.
Finalmente, Joan Calvet, otro reumatólogo de Parc Taulí, subrayó la importancia de este curso para actualizar y debatir sobre temas clave en el manejo de la artrosis, afectando a más de siete millones de españoles mayores de 40 años y siendo una de las causas principales de dolor crónico y discapacidad.










