QUIÉN ES QUIÉN
A MANO ALZADA
El Juzgado de lo Penal número 5 de Pamplona ha sentenciado a un hombre de la localidad a 21 meses de reclusión por someter a su pareja a maltrato continuo. La decisión judicial, que se tomó en junio tras un acuerdo previo entre fiscalía y defensa, impide al acusado aproximarse o comunicarse con la víctima por un lapso de 8 años y 6 meses.
El 29 de octubre, la magistrada rechazó la petición de suspender la pena, determinando que el acusado, que ya se encuentra en prisión, permanezca encerrado hasta finales de mayo de 2028, cumpliendo esta y otras sentencias anteriores.
La relación entre el agresor y la víctima comenzó en 2019 y en 2021 tuvieron un hijo, quien ahora está bajo la tutela del Gobierno de Navarra tras ser declarado en desamparo. Desde el inicio, el agresor impuso un control exhaustivo sobre su pareja, “controlando la manera en que vestía, y el teléfono móvil, para ver con quién se relacionaba”, y mostraba una conducta agresiva si ella hablaba con otros hombres, llegando a insultarla y humillarla.
Con el tiempo, las agresiones verbales escalaron a físicas. Según el fallo judicial, la mujer no denunció estas agresiones inicialmente. Estos ataques incluyeron, según se detalla, “violencia ambiental” y agresiones físicas como estrangulaciones, golpes y empujones. Durante una discusión y estando embarazada, el condenado le dio una patada en el abdomen, aunque sin afectar al bebé.
VIOLENCIA PSICOLÓGICA Y ECONÓMICA
La afectada sufre de varios trastornos, incluyendo uno de consumo severo de cannabis y anfetaminas, y ha desarrollado un cuadro psicótico reactivo, dentro de una relación marcada por el consumo de drogas, control y celos por parte del acusado, combinando violencia ambiental, física, psicológica y económica.
El acusado, diagnosticado con un trastorno moderado por consumo de alcohol y anfetaminas, también fue condenado a 56 días de trabajos comunitarios por cada uno de los tres delitos de lesiones en el ámbito familiar, considerando su adicción como atenuante. La víctima ha renunciado a cualquier acción legal futura contra él y lo ha perdonado, según consta en la sentencia.
