El Partido Animalista Con el Medio Ambiente (PACMA) ha presentado una denuncia ante la Fiscalía por la supuesta celebración de peleas de gallos en varias islas del archipiélago canario, que se estarían organizando bajo el paraguas de la Federación Gallística Canaria y de asociaciones relacionadas, pese a tratarse de una actividad expresamente vetada por la normativa estatal desde 2007.
Según detalla la formación en un comunicado, la denuncia se sustenta en abundante material jurídico y probatorio que demostraría la realización de campeonatos, liguillas y torneos gallísticos en islas como Gran Canaria, Tenerife, La Palma, Lanzarote y Fuerteventura.
Entre los episodios recogidos se encuentra el III Torneo Gallístico “La Tradición”, celebrado los días 5 y 6 de abril de 2025 en el Complejo Deportivo Vicente López Socas, una instalación municipal gestionada por el Instituto Municipal de Deportes de Las Palmas de Gran Canaria.
PACMA asegura que durante este torneo se llevaron a cabo numerosas peleas de gallos durante más de seis horas, “con animales obligados a agredirse hasta quedar inconscientes, gravemente heridos o muertos”.
La documentación aportada describe cómo los animales eran forzados a levantarse tras desplomarse, se les arrancaban plumas, se les mutilaba la cresta y se les colocaban espuelas a modo de armas, todo ello sin asistencia veterinaria ni medidas mínimas de protección o de higiene.
El partido animalista recalca que estas actividades no pueden presentarse como deporte, al no ajustarse a la definición legal de práctica deportiva ni figurar inscritas como tal en ningún registro oficial.
Asimismo, sostiene que la Federación Gallística Canaria no dispondría de respaldo jurídico para convocar y organizar este tipo de competiciones.
PACMA incide en que la Ley 32/2007, de ámbito estatal, prohibió sin excepciones en su artículo 14 el uso de animales en peleas en todo el territorio español desde su entrada en vigor, dejando sin efecto cualquier posible autorización previa contemplada en la normativa autonómica.
Además, recuerda el reconocimiento legal de los animales como seres sintientes, tanto en el Estatuto de Autonomía de Canarias como en el Código Civil, lo que, a su juicio, hace incompatible la continuidad de estos espectáculos con el marco jurídico actualmente vigente.