Economía

El Gobierno Vasco destinará 2.600 millones de euros para fomentar la gastronomía y alimentación hasta 2030

El Gobierno Vasco ha lanzado el ‘PEGA 2030’ con una inversión de 2.600 millones de euros para revitalizar el sector gastronómico y alimentario.

1 minuto

fotonoticia_20251124170906_1920

fotonoticia_20251124170906_1920

Comenta

Publicado

1 minuto

El recién lanzado ‘Plan Estratégico de Gastronomía y Alimentación de Euskadi 2030’ (PEGA 2030) del Gobierno Vasco, busca movilizar una inversión total de 2.600 millones de euros de aquí a 2030, con una distribución de 650 millones en fondos públicos y 1.950 millones provenientes de la inversión privada.

El evento de presentación se realizó en UDAPA, Vitoria-Gasteiz, con la participación del lehendakari Imanol Pradales; Amaia Barredo, consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca; y delegados de más de 150 entidades vinculadas al sector alimentario de Euskadi.

Imanol Pradales destacó la importancia vital del sector y el compromiso del Gobierno Vasco para fortalecer la cadena de valor alimentaria y gastronómica, que sostiene 133.000 empleos y representa el 10% del PIB de Euskadi.

“Si Europa realmente se compromete con su seguridad alimentaria, debe promover firmemente el sector agroalimentario con una Política Agrícola Común (PAC) reforzada y descentralizada”, enfatizó Pradales, señalando los riesgos de reducir recursos o comprometer el principio de subsidiariedad.

El plan ‘PEGA 2030’ no solo busca potenciar la competitividad y la sostenibilidad del sector, sino también su proyección internacional a través de diez proyectos estratégicos que abarcan desde la rentabilidad hasta la resiliencia del suministro, pasando por la digitalización y la economía circular.

Estas iniciativas pretenden ser un catalizador de crecimiento y se desarrollarán bajo un modelo de cooperación entre el sector público y privado, incluyendo la participación de pymes, empresas tractoras y centros tecnológicos.

La consejera Amaia Barredo resaltó que el plan es un modelo de colaboración pública-privada y se orienta a responder a los retos futuros como la transformación del consumo, el cambio demográfico y la competencia global, además de fomentar la I+D+i y crear una ventanilla única para el sector.

Finalmente, el plan contempla una estructura de gobernanza que integra a todos los actores del ecosistema agroalimentario y una Oficina de Gestión Técnica dirigida por HAZI, con AZTI colaborando en la redacción del documento y un proceso de socialización abierta para enriquecer el plan y concretar los proyectos estratégicos.