En mayo, tres ciudadanos de Bélgica fueron arrestados por estar presuntamente implicados en un caso de corrupción dentro de la Agencia de Apoyo y Adquisiciones de la OTAN (NSPA), ubicada en Luxemburgo, acusados de filtrar información confidencial a entidades del ámbito defensivo.
Al parecer, la figura central de este escándalo es un ex empleado de la NSPA, especialista en munición, que más tarde estableció su propia empresa de consultoría de defensa. Este dato ha sido revelado por medios de comunicación belgas.
Los informes indican que, junto a dos compatriotas, este individuo facilitó a varias empresas la obtención de contratos con la OTAN para la compra de aviones, helicópteros, combustible y munición durante el período de 2021 a 2025, según comunicó el canal de televisión flamenco VRT.
En cuanto a la situación judicial de los implicados, uno de ellos permanece en prisión, otro está siendo monitoreado con un dispositivo electrónico y al tercero se le ha concedido la libertad condicional bajo fianza.
La agencia NSPA se considera clave en los próximos años, especialmente cuando los aliados están incrementando sus inversiones en defensa y buscando fortalecer el apoyo a Ucrania. En 2024, la agencia cerró uno de sus mayores contratos militares, valorado en 1.200 millones de dólares para la producción de munición.