Feijóo ofrece diálogo social para subir el SMI y conciliar en las empresas, junto a rebajas fiscales y de cotizaciones

El candidato a la investidura plantea sacar las pensiones del debate político, un aumento "histórico" de la oferta de vivienda y omite la energía nuclear pese a prometer reducir la dependencia del gas

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo (3d), saluda a su llegada a la primera sesión del debate de investidura | Fernando Sánchez / Europa Press 26/9/2023

Fiscalidad y regulación amable con las empresas y diálogo social. Negociación y acuerdos. Junto a la esperada bandera de las rebajas fiscales, el candidato a la investidura, Alberto Núñez Feijóo, tendió su mano para llegar a acuerdos con empresarios y sindicatos. Desde un calendario para fijar las subidas del salario mínimo interprofesional (SMI), a medidas de conciliación en las empresas.

En su puesta de largo en el debate de investidura en el Congreso, Feijóo presentó dos fórmulas prioritarias para mejorar los horarios en los centros de trabajo: semana laboral flexible y un banco de horas que los trabajadores puedan utilizar en situaciones de necesidad, como períodos no lectivos. Todo ello invitando a sindicatos y empresarios a acordar en el plazo de un año un marco general, a partir del cual se desarrollaría en los convenios de cada centro de trabajo. Resolver con «precisión quirúrjica», ha dicho.

Plantea facilitar la conciliación en las empresas con una semana laboral flexible y un banco de horas

El presidente del PP buscó seducir también en el Congreso con una de las banderas del Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos, el SMI, de cuyas ambiciosas subidas se ha desmarcado su partido hasta ahora. Propuso acordar con los agentes sociales un calendario de subidas hasta alcanzar el 60% del salario medio, tal y como establece la Carta Social Europea.

Feijóo dividió el contenido económico de su intervención ante el Pleno del Congreso en su ya conocido plan contra la inflación –medidas urgentes y de carácter temporal que no eliminaría hasta controlar la subida de los precios– y grandes reformas con las que consolidar un crecimiento real del PIB del 2,5% de media al año en los próximos diez años.

Facilidades a empresas e inversión extranjera

Para ello, el líder del PP pone el foco en la fiscalidad y las facilidades a las empresas. Por ejemplo, generalizando el silencio administrativo positivo, la ampliación de la declaración responsable y la simplificación normativa.

También eximiría de impuestos los dos primeros años de actividad de pequeños negocios, plantea una reducción temporal de cotizaciones y una desgravación fiscal para las nuevas inversiones.

Quiere que las empresas estén obligadas a publicar sus vacantes en una plataforma para casar oferta y demanda en el mercado de trabajo

Y ante los problemas de las empresas para encontrar mano de obra cualificada, unido a los elevados índices de desempleo, propone que todas las empresas concentren sus vacantes laborales en una plataforma de obligada adhesión para casar oferta y demanda en el mercado de trabajo.

Reforma fiscal con las conclusiones de Hacienda

En el ámbito fiscal, Núñez Feijóo comprometió utilizar el trabajo realizado por los expertos convocados por el Ministerio de Hacienda para la reforma del sistema tributario, y extender a nivel nacional las rebajas selectivas de impuestos realizados por los gobiernos autonómicos presididos por el PP.

La reforma fiscal que busca el candidato ‘popular’ tiene como objetivos la captación de nuevas inversiones y patrimonios extranjeros, incentivar la actividad en zonas rurales y rebajar impuestos a familias y rentas medias y bajas.

Contra los nuevos impuestos

Respecto a los nuevos impuestos creados por el Gobierno, Feijóo ha cargado contra el Impuesto al plástico y ha deslizado la eliminación del Impuesto a la banca al anunciar su reconversión. Su propuesta pasa por concertar con las entidades bancarias dirigir las cantidades recaudadas a familias con problemas para pagar la subida de sus hipotecas.

Desliza la supresión del impuesto a la banca, proponiendo que las entidades dirijan recursos equivalentes a facilitar el pago de las hipotecas

Otra media alusión ha sido el Impuesto sobre grandes fortunas, reivindicando la autonomía fiscal de la Comunidad de Madrid, que tiene recurrida esta figura ante el Tribunal Constitucional por entender que vulnera sus competencias.

Recortar gasto con la deuda en el punto de mira

No ha sido el único momento en el que el candidato ha optado por no ahondar en detalles, como en el caso del recorte del gasto público –se ha comprometido a «liberar gasto superfluo» para «atender otras prioridades», sin concretar áreas ni objetivos–.

En su diagnóstico sobre la economía española, para el candidato a la investidura «lo más lamentable e irresponsable» es una deuda pública «desorbitada»: «Nos hace muy vulnerables en el contexto europeo de recuperación de las reglas fiscales«, ha apuntado.

Omisiones en pensiones y energía: ¿Y la nuclear?

Tampoco ha abundado en detalles al hablar de las pensiones. Al contrario, busca que estén fuera del debate político y excluirlas de la «refriega política». Sólo ha comprometido su revalorización «en cualquier circunstancia», pero no ha especificado si vinculadas al IPC, ni tampoco sus planes con las reformas aprobadas en esta legislatura para prever, entre otras cuestiones, el aumento de los ingresos en el sistema para compensar el mayor gasto.

Cree que «lo más lamentable e irresponsable» en la economía española es la «desorbitada» deuda pública

Otra ausencia en el discurso ha sido la energía nuclear, gran apuesta del PP en su programa electoral. Feijóo ha apostado por reducir la dependencia del gas y del petróleo criticando el aumento de importaciones de gas y de emisiones durante la crisis energética, pero no ha detallado la alternativa, que necesariamente pasaría por una prórroga de la actividad nuclear –el calendario de cierres finaliza en 2035–. «Transición ecológica, sí. Dictadura activista en ningún caso», ha dicho.

En materia de vivienda, la apuesta de Feijóo pasa por superar los años del ‘boom’ inmobiliario con un «incremento histórico de la oferta aprovechando suelos públicos ociosos», con el fin de contener los precios del alquiler. La subida sin freno en las rentas, ha argumentado, «muestra el fracaso de la decisión de intervenir el mercado topando precios». Pese a estar regulada en la Ley de Vivienda, su aplicación aún no ha causado ninguna intervención de mercado. Sólo Cataluña ha solicitado regular los precios en zonas tensionadas y aún no cuenta con la autorización del Ministerio de Transportes.

Salir de la versión móvil