Ione Belarra, Javier Sánchez Serna, Martina Velarde y Noemí Santana. Son los nombres de los cuatro diputados de Podemos. Cuatro votos que tienen en sus manos varias iniciativas clave para el ejecutivo, que se juega en una misma semana el Proyecto de Ley de Movilidad Sostenible y el embargo de armas a Israel. Los morados están en el ‘no’ y, si bien ponen precio a su cambio de postura, no parece haber una negociación abierta que pueda reconducir la situación. ¿Caerán ambas?
Lo que comenzó como un grupo de cinco personas (los antecitados más Lilith Verstrynge, que dejó su acta y todos sus cargos) disueltas en el Grupo Parlamentario Plurinacional de Sumar han pasado a ser cuatro votos adscritos al Mixto determinantes. Dada la aritmética parlamentaria, son decisivos, tanto que la búsqueda de equilibrio por parte del Gobierno entre Podemos y Junts está dificultando la gobernabilidad y poniendo en jaque iniciativas.
Sin ir más lejos, serán los que decanten la balanza en dos asuntos vitales para el Ejecutivo. Las cuentas en ambas votaciones están claras. Si Podemos se suma al bloque PP, Vox y UPN, los 175 ‘noes’ darían al traste con el Proyecto de Ley de Movilidad Sostenible y el Real Decreto-ley con el embargo de armas a Israel no se convalidaría.
Un embargo descafeinado
Con la confirmación de Junts de que su grupo votará a favor de convalidar el Real Decreto-ley y que se tramite como proyecto de ley, todos los focos se sitúan sobre Podemos.
Fuentes del partido morado explican a Demócrata que, a su juicio, no es un embargo de armas efectivo, por lo que plantean dejar caer el texto, aprobar otro en Consejo de Ministros que sí constituya un verdadero embargo y entonces, votarán a favor.
Preguntados sobre si la situación de la flotilla humanitaria que partió rumbo a Gaza y fue interceptada cambia algo, aseguran que no por su parte, pero que esperan que las movilizaciones convocadas estos días presionen al Ejecutivo.
El socio minoritario del Gobierno, Sumar, también tiene dudas sobre algunos puntos del Real Decreto-ley, en concreto, en lo relativo a la disposición adicional primera, que avala al Consejo de Ministros a, de forma excepcional, “autorizar las transferencias de material de defensa, de otro material y de productos y tecnologías de doble uso”.
Unas excepciones que Sumar pretende cercar a través de una proposición de ley que ya ha sido registrada y que formalizaría un protocolo de inspección de buques con origen o destino a Estados sobre los que recaigan medidas judiciales, indicios o sospechas de genocidio o crímenes de guerra.
Así las cosas, desde Sumar advierten que “Podemos tendrá que analizar bien qué quiere hacer y qué quiere ser en esta votación”. “Tendrá que explicárselo a sus propios votantes si deja que caiga un embargo de armas a un Estado genocida como es Israel”, remachan.
Una ley muy trabajada y consensuada
El dictamen del Proyecto de Ley de Movilidad Sostenible superó la votación en Comisión sin problema porque Podemos no tiene representación en la Comisión de Transportes y Movilidad Sostenible, ya que la voz del Mixto es Néstor Rego, del BNG.
En Pleno, los de Ione Belarra se sumarán a PP, Vox y UPN para bloquear la ley. El precio para tornar su voto en afirmativo es detener las ampliaciones previstas del aeropuerto de El Prat y del puerto de Valencia.
¿Hay margen para negociar? Poco. Fuentes del Gobierno consultadas por Demócrata admiten que Podemos es uno de los huesos más duros actualmente a la hora de negociar -junto con Junts-, no ya en Movilidad Sostenible, sino en cualquier asunto, como el embargo de armas a Israel. Lamentan que parten siempre de una posición de máximos.
Otros grupos del bloque de investidura aquejan, en sintonía con el Ejecutivo, que Podemos se haya acastillado en el ‘no a todo’. “Ellos creen que les da rédito, pero se están pasando de rosca”, apuntan fuentes de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). Voces del grupo Sumar se mueven en la misma tónica e incluso ironizan: “Esperemos que podamos aprobar la ley y acabar con ella, a ver si Podemos nos deja”.
En el plano concreto, Podemos registró 63 enmiendas y la ponencia integró varias de ellas. El principal obstáculo sigue siendo político, pues desde hace meses, en concreto desde que el terremoto Cerdán sacudió el panorama político, se han negado a negociar sistemáticamente. Una situación agravada tras el informe del pasado viernes de la UCO de la Guardia Civil, que ha detectado más de 95.000 euros desembolsados por el ex ministro de Transportes, José Luis Ábalos, sin justificación bancaria.