Salvador Illa, presidente de la Generalitat, junto a Denis Itxaso, consejero de Vivienda y Agenda Urbana del Gobierno Vasco, han mantenido un encuentro para intercambiar estrategias y metas en la gestión habitacional, incluyendo la regulación del alquiler y la expansión de la oferta de vivienda en ambas regiones.
La reunión se desarrolló en la sede de Alokabide en Vitoria-Gasteiz, donde se discutió sobre el modelo de vivienda pública en el País Vasco.
En esta cita, el Gobierno Vasco detalló su plan que incluye la movilización de terrenos y presupuestos expansivos, ascendiendo a más de 535 millones de euros para 2025, así como reformas legales para aumentar el parque público de vivienda de manera constante.
El Departamento de Vivienda ha comunicado que su objetivo es construir 7.000 nuevas viviendas en los próximos tres años, junto a “medidas urgentes para abrir el acceso a una vivienda a las clases medias, intervenir los precios de los alquileres en zonas tensionadas y promover acuerdos que mejoren la movilización de suelos y la captación de más recursos destinados a construir vivienda pública”.
Itxaso resaltó que esta política toca tanto la oferta como la demanda, inspirándose en modelos globales como el de Viena, en donde “durante un siglo un sistema público sólido y sostenido en el tiempo ha demostrado que la vivienda puede ser una auténtica palanca de cohesión social y estabilidad económica”.
El consejero ha enfatizado la firme apuesta del Gobierno Vasco por priorizar la vivienda en sus políticas, con presupuestos ambiciosos y una colaboración interadministrativa que permite expandir el parque público de vivienda, “que es la principal infraestructura de país”.
Alokabide actualmente gestiona más de 17.000 viviendas en alquiler asequible y programas como ‘Gaztelagun’ o la ‘Prestación Económica por Vivienda’, beneficiando a aproximadamente 70.000 personas con sus políticas habitacionales.
AGENDA COMPARTIDA
El Departamento de Vivienda y Agenda Urbana ha destacado que esta visita ha resaltado “un diagnóstico común” sobre los desafíos económicos y sociales en la vivienda. Ambas regiones coinciden en que “solo con medidas estructurales, inversiones sostenidas y colaboración institucional será posible garantizar el derecho a la vivienda a las generaciones presentes y futuras”, reconociendo que “la vivienda puede convertirse en un factor de desigualdad y truncar las aspiraciones profesionales y proyectos de vida de la ciudadanía”.
El Gobierno Vasco ha subrayado que el encuentro simboliza esta “visión compartida” y abre la puerta a continuar colaborando en soluciones que conviertan la vivienda en un pilar fundamental de bienestar y cohesión social.











