La Consejería de Medio Rural y Política Agraria del Principado ha anunciado una propuesta para disminuir en un 75% las capturas de salmón, estableciendo un límite de un único ejemplar por pescador cada año, en comparación con los dos permitidos actualmente. Esta medida figura entre las principales modificaciones del borrador de la nueva regulación de pesca fluvial, que será discutida en la próxima reunión del Consejo de Ecosistemas Acuáticos y de la Pesca el día 20.
Según un comunicado del Principado, la iniciativa busca adaptarse a la realidad actual de las poblaciones de peces y del entorno fluvial. Los informes más recientes de la Dirección General de Planificación Agraria indican un descenso en la población adulta de salmón, aunque se observa un incremento en el número de juveniles, y una notable disminución en las capturas de esta temporada, registrando el mínimo histórico.
Adicionalmente, se propone reducir los cupos por río a aproximadamente una cuarta parte, disminuyendo de 620 salmones este año a 154 el próximo. La distribución por cuencas fluviales quedaría de la siguiente manera: Nalón-Narcea: 60 salmones (20 como máximo en zona libre); Sella-Piloña: 52 salmones (17 como máximo en zona libre); Cares-Deva: 30 salmones (10 como máximo en zona libre); Esva: 5 salmones; Eo: 7 salmones. Estos límites podrían aumentar un 30% si hay una buena entrada de salmones antes del 10 de junio de 2026.
En cuanto a los horarios, la jornada de pesca comenzará media hora más tarde por la mañana y terminará media hora antes por la tarde, reduciendo el tiempo de pesca en una hora diaria. Este ajuste busca mejorar la visibilidad y reforzar la vigilancia.
La temporada de pesca, tanto con muerte como sin muerte, empezará el sábado 25 de abril y concluirá el miércoles 15 de julio. Este cambio en las fechas de apertura se debe a la llegada más tardía de los salmones, una tendencia reciente que permite que los primeros ejemplares lleguen a las zonas de refugio. Desde el 1 de junio, solo se permitirá pescar en cotos en el tramo principal del río Narcea y se ampliarán las zonas vedadas a partir del 15 de junio, con el objetivo de proporcionar refugios naturales para los salmones durante su remonte.