La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) ha señalado una ‘grave crisis’ que afecta a los viticultores de la D.O. Ribera del Duero tras concluir la vendimia, con un volumen cercano a los 130 millones de kilos de uva y unas pérdidas superiores a 10 millones de euros debido al descenso en el precio de la uva.
Por esta razón, UCCL demanda ‘la creación inmediata’ de una Mesa de Crisis con la participación de la Consejería de Agricultura para tratar, ‘con responsabilidad y compromiso, la situación de precios injustos’ y el ‘incremento constante de los costes de producción’.
La organización ha informado de reducciones en el precio de la uva que alcanzan hasta el 50 por ciento, sumado a ‘los elevados costes derivados de los tratamientos contra el mildiu’.
‘No se puede seguir mirando hacia otro lado mientras los viticultores pierden dinero cada campaña. La Ribera del Duero no puede permitirse convertirse en otra zona en crisis permanente como Rioja’, advierte UCCL.
UCCL recuerda que ya en 2016 alertaron sobre la necesidad de controlar las nuevas plantaciones y la entrada de derechos de otras zonas vitivinícolas. A pesar de ello, el Consejo Regulador ‘ha permitido un crecimiento descontrolado, sin tener en cuenta el equilibrio del mercado ni la sostenibilidad del territorio’.
‘Esta falta de planificación está poniendo en riesgo la viabilidad de los pueblos ribereños, el empleo en las bodegas y la pervivencia de un modelo de viticultura familiar y de calidad que ha sido motor económico y social de las provincias de Burgos, Valladolid, Soria y Segovia’, afirma UCCL.
‘Pedimos responsabilidad a las bodegas. No es de recibo que muchos contratos se firmen el día antes de vendimiar y solo por campaña. Los viticultores merecen respeto y precios dignos por su trabajo’, enfatiza UCCL.















