La directora gerente del Instituto Aragonés de la Juventud (IAJ), Cristina Navarro, subrayó en su reciente comparecencia ante la Comisión de Bienestar Social y Familia de las Cortes de Aragón, la disponibilidad de “herramientas eficaces” para “actuar de manera coordinada ante situaciones delicadas” relacionadas con el suicidio, el acoso y el abuso sexual en sus actividades. Cristina Navarro enfatizó la responsabilidad de proporcionar a los profesionales que interactúan con jóvenes, recursos precisos y prácticos para responder de manera inmediata y adecuada ante posibles incidencias. “Es un pilar fundamental en el desarrollo personal y social de la juventud aragonesa”, agregó.
Navarro inició su intervención detallando el protocolo contra la conducta suicida que busca “prevenir, detectar e intervenir de forma temprana, ofreciendo a los profesionales pautas concretas para actuar con seguridad”, incluyendo técnicas para reconocer ideación suicida y mejorar la comunicación con los afectados. “No solo es una guía técnica, es un compromiso institucional con la vida y el bienestar emocional de nuestros jóvenes”, destacó la directora.
En cuanto al acoso, el protocolo diseñado pretende “responder de una forma adecuada ante cualquier muestra de acoso”, destacando la importancia de la identificación temprana en entornos como colonias y campamentos. El protocolo contra la violencia sexual, por su parte, se centra en la protección de niños y adolescentes frente a abusos sexuales.
Además, se han introducido otros manuales como “el manual de delegados y delegadas de protección” y “el manual de profesionales de ocio y tiempo libre”, que establecen procedimientos claros de actuación y criterios de evaluación de riesgos. Representantes de varios partidos políticos han valorado estos protocolos como avanzados y necesarios para garantizar entornos seguros y educativos para la juventud.











