Luis María Beamonte, diputado del PP, ha expresado su preocupación por las consecuencias ‘devastadoras’ que traería la Ley de Movilidad Sostenible a Aragón, destacando el ‘aislamiento’ que sufrirían 151 municipios, donde residen unos 134.000 habitantes y que perderán sus paradas de autobús, afectando a cerca de 25.000 viajeros anuales.
En una conferencia de prensa, Beamonte ha criticado que la ley se presenta como ‘moderna y verde’, pero en realidad, ha dicho, es ‘muy ideologizada, centralista e injusta’. El político ha señalado que no se garantiza la conservación de las paradas actuales, dejando esta decisión en manos de las concesionarias, como indica el artículo 49, y se critica el uso del vehículo privado.
Por ello, el Grupo Parlamentario ‘Popular’ ha presentado una enmienda total a la ley, argumentando que no aborda los problemas reales del transporte y se tramitó apresuradamente sin diálogo ni consenso. Beamonte ha calificado la norma de ‘imposición’ y ha mencionado que el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, admitió que ‘ni siquiera era su ley’.
Asimismo, Beamonte ha cifrado en tres millones los españoles que perderán su único medio de transporte público, señalando que la ley propone reducir drásticamente las paradas y rutas disponibles. ‘Esto significa aislamiento y menos oportunidades, lo que va a llevar a más desigualdad’, ha declarado el diputado, subrayando el impacto negativo particularmente en Aragón.
En respuesta, el PP ha propuesto 95 enmiendas para proteger las paradas, horarios y frecuencias actuales y evitar que las decisiones económicas dejen a los pueblos sin autobús. Además, han demandado un plan de movilidad más inclusivo y la oposición de partidos como el PSOE y Vox a estas medidas ha sido criticada por Beamonte.
Finalmente, el Gobierno de Aragón ha anunciado un plan que aumenta los servicios de autobús y reduce las tarifas, en un esfuerzo por mejorar la accesibilidad en la región, en contraste con las políticas del Estado.













