Este lunes, la Comisión de Agricultura, Ganadería y Alimentación aprobó una proposición no de ley, propuesta por Marcel Iglesias del PSOE, con el objetivo de que el Gobierno de Aragón presente una propuesta para la nueva Política Agraria Común (PAC) que considere el papel vital de la ganadería extensiva en la gestión del territorio y en la prevención de incendios forestales, entre otros aspectos.
La propuesta, que no incorporó una enmienda del PP, recibió el rechazo de este partido en su primer punto sobre el papel de la ganadería extensiva en la PAC. Sin embargo, otros puntos como el incentivo económico para el pastoreo en áreas boscosas y praderas, el coeficiente de admisibilidad de pastos y las subvenciones para collares GPS localizadores, contaron con el respaldo unánime de todos los grupos parlamentarios.
Marcel Iglesias destacó la importancia histórica de la ganadería extensiva en la creación de paisajes mosaico y señaló la necesidad de realizar tareas de limpieza de montes y otros trabajos forestales que no pueden llevarse a cabo únicamente por cuadrillas. Además, subrayó la importancia de trabajar para evitar el abandono y valorar el trabajo de los ganaderos en el territorio.
Desde el PP, José María Giménez propuso que la despoblación sea una prioridad en la nueva PAC y continuó apoyando el pastoreo en zonas boscosas y praderas. Santiago Morón de Vox resaltó el papel de la ganadería extensiva en la vitalidad de los pueblos y en la lucha contra la despoblación. Pilar Buj de Aragón-Teruel Existe enfatizó la necesidad de reconocer la labor medioambiental del ganado en la prevención de incendios forestales. Finalmente, Alberto Izquierdo del Grupo Parlamentario Mixto opinó sobre la financiación de collares GPS y la necesidad de cambiar la perspectiva en el campo hacia el apoyo directo al productor y la excelencia.